- Bienestar. El gur� de la felicidad de Harvard desvela 3 actitudes que le funcionan para ser m�s feliz cada d�a
- Bienestar. La teor�a de la felicidad de Einstein es la clave para empezar a vivir mejor hoy (los japoneses lo confirman)
Construir una vida feliz no es el resultado de una f�rmula matem�tica. Pero psic�logos, psiquiatras y expertos en este campo s� conocen algunos de los ingredientes de la receta de la felicidad. Aqu� tienes algunas de sus afirmaciones a las que puedes recurrir para alcanzar este estado.
�Positivismo? Felicidad y ser positivos no es lo mismo
"Parece que la felicidad y la positividad se han convertido en una meta y en una obligaci�n. Continuamente nos dicen que debemos ser m�s agradecidos o m�s positivos. Si algo sale mal en tu vida, es porque has tenido una 'mala actitud' o porque 'no te esfuerzas lo suficiente'. (...) El pensamiento positivo ha sido empaquetado y vendido como la cura para todos nuestros problemas". Whitney Goodman, terapeuta.
Expectativa: no se puede ser feliz todo el tiempo
"La expectativa de ser feliz todo el tiempo, como prometen algunos libros de autoayuda, es perjudicial. Querer ser m�s feliz es leg�timo y deseable, pero tambi�n hay que ser realista: no podemos ser siempre felices. Si no somos conscientes de que es inevitable experimentar altibajos, nos espera una gran decepci�n. Adem�s, "si te empe�as en ir en pos de la felicidad tan s�lo conseguir�s ser infeliz (...) En palabras del fil�sofo del siglo XIX John Stuart Mill: los �nicos que son felices son los que tienen sus mentes fijas en alg�n objeto que no sea su propia felicidad". Tal Ben Shahar, profesor de psicolog�a positiva de la Universidad de Harvard.
Asombro: la capacidad de ser felices
"Creo que maravillarte es una de las formas m�s puras de alegr�a. Disfruto de este sentimiento. Yo me maravillo constantemente y en todas partes: cuando viajo o leo, cuando conozco gente o cuando me enamoro, cuando escribo o cuando siento latir mi coraz�n o contemplo un amanecer. La capacidad de maravillarnos es una de las fuerzas m�s poderosas con las que nacemos y una de nuestras mejores habilidades tambi�n. Es el motor de la vida. Tengo tres hijas a las que quiero m�s que a m� mismo y pienso que una de las cosas m�s importantes que puedo hacer por ellas es, adem�s de mostrarles mi amor, preservar su instinto nato para sentir curiosidad y maravillarse". Earling Kagge, explorador noruego.
Cu�ndo: nunca es tarde para ser felices
"Algunos hemos vivido la mayor parte de nuestras vidas y las rememoramos; otros tienen por delante gran parte de las suyas y est�n deseando experimentarlas. A todos, con independencia de la edad, nos ayuda recordar que esto no solo trata sobre logros personales, sino sobre ser importantes para alguien, sobre dejar algo para las futuras generacionesy sobre formar parte de algo m�s grande que nosotros: que esto va de qu� significamos para los dem�s. Y nunca es tarde para empezar a dejar huella". Robert Waldinger, profesor de psiquiatr�a de la Facultad de Medicina de Harvard
Aceptaci�n: sufear las olas de la vida
"Imagina que eres un surfista y est�s esperando para alinearte con la pr�xima ola. No sabes cu�ndo va a llegar, no sabes qu� tama�o tendr� ni su velocidad ni d�nde se presentar�. Sea como fuere esa ola, cuando te alcance, t�mala como si la hubieras estado esperando toda tu vida, como si fuera la ola perfecta. Quiz� te preguntes: �significa eso que todas las olas son perfectas? S�". Cuando aceptamos que la ola que nos toca procede de una fuerza superior y m�s grande que nosotros y le damos todo su valor, como si fuera la ola perfecta, estamos empleando una herramienta poderos�sima para vivir. Phil Stutz, psiquiatra.
Goce: elige el disfrute sobre el placer
"El disfrute y el placer son t�rminos que a menudo se usan indistintamente, pero no son lo mismo. El placer te sucede; el disfrute es algo que creas a trav�s de tu propio esfuerzo. El placer es el mareo que se obtiene con un poco de alcohol; el disfrute es la satisfacci�n de un buen vino, bien entendido". Y a�ade: "El goce es mejor que el placer porque es m�s consciente y permanente. Como se�ala Csikszentmihalyi (el gur� del flow) todo el mundo disfruta comiendo cuando tiene hambre, pero se necesita algo de conocimiento y cultivo para disfrutar de la comida. Despu�s de terminar el almuerzo, el placer desaparece y, de hecho, la idea de comer ya no es atractiva porque su necesidad f�sica ha sido satisfecha. Mientras tanto, el recuerdo de una comida disfrutada con amigos trasciende la experiencia inmediata y puede traer buenos sentimientos mucho despu�s de que haya terminado". Arthur Brooks, profesor en la Harvard Business School.
Paradoja: no persigas la felicidad
"Cuanto m�s la valoramos y la ansiamos m�s escurridiza se vuelve". (...) "Hay una soluci�n a este enredo: podemos buscar la felicidad de manera indirecta. En lugar de buscar la felicidad en s� podemos poner nuestra mira en elementos que conducen a la felicidad. As�, nos concentraremos en estos elementos y no en la felicidad" (...) "Intent�moslo con una analog�a: piensa en la luz del sol, que es vital para la vida en la Tierra. �Qu� ocurre si miras directamente al sol? Te da�ar�s los ojos, porque no es bueno; podr�as incluso perder la vista. Entonces, �c�mo disfrutar de mirar al sol? De manera indirecta, contemplando su luz a trav�s de un prisma, que la descompone en los diferentes colores del arco�ris. Entonces s� podr�s mirar directamente a lo que tienes delante de los ojos, e incluso disfrutar de ello". Tal Ben-Shahar, profesor de la Universidad de Harvard.
Todo cambia: la felicidad tambi�n
"Constantemente, se nos recuerda que no s�lo podemos sino que debemos ser felices, es decir, sentirnos de maravilla cada d�a. Esto hace que el cerebro coteje nuestras vivencias subjetivas con un objetivo que, en la pr�ctica, es inalcanzable: el bienestar constante no es un estado natural para el ser humano. El cerebro cambia constantemente nuestro estado an�mico bas�ndose en la informaci�n que le llega del cuerpo y del entorno. Desde la perspectiva del cerebro, blindarse en un estado emocional positivo, para que siempre nos sinti�ramos fant�sticamente bien, es igual de poco realista que pensar que el pl�tano en la encimera de la cocina fuera a saciarnos para el resto de nuestra vida. Simplemente, no estamos construidos as�, pero nos enga�amos a creer que s�". Anders Hansen, psiquiatra del Instituto Karolinska de Estocolmo.
Dopamina: las hormonas de la felicidad no lo son todo
"El cerebro tiende a buscar placer y recompensa en cosas inmediatas para evitar dolor, malestar, aburrimiento y estr�s" (...) "Si toda tu dopamina la activas desde fuera con cosas que te perjudican, tu cerebro piensa me lo dan de fuera, puedo dejar de fabricarlo yo. Cuanta mas gratificaci�n instant�nea, cuanta m�s novedad, cuanta m�s droga, el cerebro se desensibiliza de los est�mulos cotidianos. Por lo tanto, cada vez cuesta m�s sentir placer por actividades del d�a a d�a que dan bienestar (no tan inmediato) y no perjudican (deporte, naturaleza, lectura, vida social...)" (...) "Con las adicciones la persona se siente triste, apagada, deprimida y sin motivaci�n. Lo �nico que reactiva la euforia es consumir la droga o volver al comportamiento adictivo. Ah� empieza la tolerancia: necesitas m�s dosis para sentir lo mismo". Marian Rojas Estap�, psiquiatra.
Relaciones: el poder de los verdaderos amigos
"No necesitas tener docenas de amigos para ser feliz, de hecho, solemos ser m�s selectivos con los amigos a medida que envejecemos. Pero el n�mero debe ser m�s que cero, y m�s que s�lo tu c�nyuge o pareja" (...) "En nuestro mundo go-go, donde el �xito profesional se valora por encima de todo y el workism se ha convertido en una religi�n para muchos, puede ser f�cil rodearnos de amigos de negocios. Al hacerlo, podemos perder de vista la m�s b�sica de las necesidades humanas: conocer a los dem�s profundamente y ser profundamente conocidos por ellos". �C�mo ponerte a ello? Busca amigos en ambientes donde no te puedan dar nada m�s que amistad. "Si tienes suerte y trabajas para profundizar tus relaciones, pronto descubrir�s que tienes un amigo real o dos a quienes puedes hacer el mayor cumplido: "No te necesito, simplemente te amo". Arthur Brooks, profesor en la Harvard Business School.
Proyecto: tener un prop�sito para ser felices
"Un proyecto de vida es un programa personal que yo dise�o y en donde meto cuatro grandes temas que saltan, suben, bajan y se arremolinan en torno a ellos mismos. Amor, trabajo, cultura y amistad. La felicidad siguiendo este curso de ideas, es una tetralog�a en la cual yo tengo una vida afectiva, vida profesional, la cultura que es la est�tica de la inteligencia y la amistad. Dice Sancho Panza en las Bodas de Camacho: Amigo que no da y el cuchillo que no corta, aunque se pierda, no importa". Enrique Rojas, psiquiatra.
Consciencia: una clave de la felicidad
"�Es posible vivir en un estado de felicidad independientemente de lo que ocurra fuera, como un gran amor, una gran decepci�n o un gran dolor? �Se puede ser feliz sin que ello dependa de lo que elijamos lograr, hacer, tener u obtener en la vida? Ocurre en un instante, el preciso instante en el que nos damos cuenta de que, en ese mismo momento, en este presente, estamos vivos, despiertos en la plena consciencia de que existimos. La felicidad se manifiesta como un estado natural del ser cuando se es plenamente consciente de existir. (...) Esta es la verdadera revoluci�n. Estamos condenados a la felicidad, s�lo tenemos que rendirnos". Daniel Lumera, bi�logo naturalista, escritor y fundador del International Kindness Movement.
Oxitocina: la hormona de la felicidad
"Un simple abrazo puede liberar los niveles de oxitocina del cuerpo. Tambi�n el sexo o recibir un regalo" (...)"Lo que desata la liberaci�n de oxitocina es el hecho de pensar en la otra persona con cari�o y con ganas de agradarle". Ana Asensio, psic�loga sanitaria, psicoterapeuta, doctora en Neurociencia por la Universidad Complutense de Madrid y fundadora del centro Vidas en positivo.
Relaciones: amigos y pareja
"Para ser feliz hay que tener dos personas a las que llamar�as en mitad de la noche", Robert Waldinger, psiquiatra y profesor de Harvard, autor del mayor estudio sobre felicidad. Adem�s, a�ade: "Con las relaciones que se dan por sentado, como la del c�nyuge o la pareja, ayuda mucho tener estos puntos de queda fijos para que no se deterioro la relaci�n".