Esta frase es del Gerente del Banco de la República, Leonardo Villar. Tal parece que la parte más dolorosa del ciclo económico que vivimos ha pasado y podemos empezar a ver el futuro del país con algo más de optimismo.
Esto ocurrió sin que el Gobierno Nacional ejecutará un plan de reactivación, pues todos sabemos que las acciones prometidas en vivienda, infraestructura y aumento de gasto público no han sucedido. Esto muestra la enorme resiliencia de la economía colombiana y que la diversificación de la producción y la existencia de mercados regionales y locales, nos dan una buena capacidad para enfrentar la parte negativa del ciclo económico.
Luego de estas declaraciones hemos visto algunas cifras que excedieron lo previsto por los analistas: El PIB del primer trimestre fue mayor al esperado, las importaciones han vuelto a repuntar, el indicador de seguimiento económico del Dane mostró un crecimiento importante. Si bien es cierto que la inflación no continúo bajando, como se esperaba, es claro que la tendencia si se mantiene y es posible que este año tengamos una acumulada por debajo del 6%.
El Ministro de Hacienda ha venido consolidando una estrategia de tranquilidad en lo Macro. El anuncio de un recorte de $20 billones, la reiteración del compromiso por cumplir la meta fiscal, que incluso ya el mismo presidente anuncia. La publicación de un marco fiscal de mediano plazo donde se reconoce la dificultad en el crecimiento económico y en el recaudo tributario y el haber logrado la aprobación de la ley que aumenta el cupo de endeudamiento, son un conjunto de medidas que sin lugar a dudas contribuyen a un mejor ambiente económico.
Hoy, los analistas más conservadores reconocen que el crecimiento será, por lo menos, del 1,3%, el doble del año anterior, y los más optimistas están hablando de una cifra cercana al 2%. La inflación seguirá su senda de disminución y todo parece indicar que en 2025 estará de nuevo dentro del rango meta del Banco. Por ello es previsible que se sigan presentando reducciones en la tasa de intervención de esta entidad. Se cumplirá la regla fiscal, y el desempleo no aumentará.
En resumen, la macroeconomía parece estar funcionando y eso es sin duda una buena noticia. Eso no quiere decir que no haya riesgos y dudas y que vivamos en un país maravilloso. No, pero luego de varios meses con deterioros en muchos de los indicadores económicos, es innegable que estamos en otro ciclo y la segunda parte de este año será mejor que los últimos 18 meses.
Organizar la macro es necesario, pero no suficiente. El gobierno debe también debe mostrar resultados en seguridad y ojalá inicie un ciclo de mayor ritmo en la ejecución del gasto público, lo cual podría dar un empujón al crecimiento económico.
César Caballero
Gerente Cifras & Conceptos S.A.
