Ayuso rectifica el proyecto de reforma del hospital de La Paz cinco años después de su anuncio y tras presentarlo dos veces

El Gobierno de la Comunidad de Madrid, que preside Isabel Díaz Ayuso, ha rectificado este martes el proyecto de reforma del hospital de La Paz que presentó en 2019, arrancó en 2021 y puso en duda en 2022 y 2023, mientras el Ejecutivo se dividía entre partidarios y detractores de los diferentes planes que se han ido poniendo sobre la mesa. La reconstrucción de esta infraestructura, impulsada en 2018 por Cristina Cifuentes, fue presentada dos veces por la actual presidenta: en un Consejo de Gobierno de marzo de 2021, y durante una visita al centro en diciembre de aquel año para desvelar una maqueta interactiva y dar por iniciadas las obras. El nuevo plan duplica la inversión prevista por el anterior al llegar a los 1.000 millones de euros; afectará a más de 550.000 m2, frente a los 320.500 inicialmente previstos; y estará acabado en 2032, según ha asegurado Ayuso.

“Todos juntos, sin descanso, hemos podido replantear este ambicioso proyecto, que sustituye al inicial, que era simplemente la remodelación de La Paz, que no era poco ya, para ser mucho más ambicioso”, ha admitido la rectificación Ayuso durante un acto en la Real Casa de Correos, sede del Ejecutivo autonómico, en el que no ha admitido preguntas. “Es una de las obras civiles de mayor complejidad y envergadura de la historia de la región”, ha añadido. “Va a permitir aunar la última tecnología y las terapias más avanzadas con la actividad docente y conectar las necesidades de los pacientes con la investigación en las mejores instalaciones”.

Inaugurado en 1964, La Paz es uno de los centros sanitarios históricos de la región: más de 700.000 madrileños han nacido aquí desde entonces. En el complejo, de 190.000 metros cuadrados, trabajan diariamente más de 6.000 sanitarios. Es una referencia sanitaria que atiende anualmente a más de 500.000 ciudadanos. Pero el hospital, según todas las partes implicadas, pide a gritos una renovación. Con el paso del tiempo, registra cada vez con mayor frecuencia averías de diverso tipo: roturas de tuberías, inundaciones, caídas de techos...

La reforma consecuente, presentada por el Gobierno con el boato que se reserva a los grandes anuncios, se hará en tres fases, y “sin parar un solo día la actividad asistencial”. Los precedentes, sin embargo, rodean de interrogantes el proyecto.

En 2019, Campo de Retamas fue el diseño elegido en un concurso arquitectónico para dar nueva vida a La Paz, con un coste de 17.712.849,64 euros y un gasto previsto en las obras de más de 500 millones. En 2020, la pandemia del coronavirus dejó todo en pausa. Con el arranque de 2021, llegaron las dudas, y un pulso interno: una parte del Gobierno, liderada por los consejeros de Hacienda, Presidencia y Ordenación del Territorio, optaba por hacer un nuevo hospital en los terrenos de Madrid Nuevo Norte, frente al titular de Sanidad que, con el apoyo de consejeros de Ciudadanos en el ejecutivo de coalición, abogaba por mantener el plan de reformar el hospital in situ.

En marzo de ese año, Ayuso oficializó la victoria de esa última propuesta: el plan de 2019 seguía adelante, según anunció en una rueda de prensa en la que añadió que el Zendal acogería a pacientes de La Paz durante la reforma. Solo 10 meses después, la presidenta se desplazó al hospital para activar la maqueta interactiva de la reforma. “El proceso de ejecución de obras arranca ya”, se leía en la nota de prensa de la visita. No obstante, las dudas persistían.

Así, a finales de 2022, el Gobierno empezó a incluir en el proyecto una parcela adyacente de la Universidad Autónoma de Madrid. Esa idea, la más parecida de las valoradas a la que ahora se va a ejecutar, sembró el desconcierto en la Administración. Así, la dirección del centro planteó a la Junta Técnica Asistencial de La Paz ―órgano interno formado por altos cargos sanitarios que vela por la actividad del centro— estos cambios. Según los presentes, se escucharon posturas en contra hacia la dirección del centro. “Sería una vuelta a la casilla de salida”, afirmó un alto cargo sanitario. “Además, se plantean una serie de dificultades para la asistencia a los pacientes por la separación entre los hospitales General/Traumatología y Materno/Infantil, eliminando sinergias y creando problemas añadidos a los servicios centrales. Las más de 500 reuniones, incluidas las 250 de revisión de planos con asistencia de más de 4.000 profesionales, han perdido su utilidad”, detalló este alto cargo.

Tras descontar un total de cinco años desde la presentación del proyecto elegido para la reforma, estas son las principales características del plan anunciado este martes, y que incluye una nueva Facultad de Medicina para la Universidad Autónoma de Madrid (con una edificabilidad máxima de 42.500 metros cuadrados), y un centro integral de cáncer pediátrico, además de una unidad de protonterapia.

“La Ciudad de la Salud de la Comunidad de Madrid albergará las nuevas instalaciones del hospital público universitario La Paz y la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma, además de otros espacios destinados a investigación”, se lee en un comunicado gubernamental. “El proyecto sumará más de 550.000 metros cuadrados construidos destinados a actividad asistencial, docente e investigadora, duplicando la superficie actual”, sigue. Y se añade: “El área de hospitalización dispondrá de 1.140 camas y otras 218 de reserva para posibles incrementos de demanda. Todas las habitaciones serán individuales, si bien el 30% tendrá capacidad para doblar su ocupación. La zona quirúrgica estará formada por 49 quirófanos, incluyendo híbridos y robóticos. Se habilitarán 243 puestos de hospital de día, 194 de UCI y 255 de urgencias”. El Ejecutivo asegura que lo principal de la reforma, que es el hospital general, estará listo en cuatro años. Pero tras tantas idas y venidas, solo el paso del tiempo confirmará la predicción.

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