SALUD
Salud

�Por qu� todo el mundo habla de Neurociencia? La cient�fica Nazareth Castellanos lo explica

Actualizado

Neurociencia es la palabra de moda. Pero �qu� es exactamente? La Neurociencia estudia c�mo cada �rgano de nuestro cuerpo tiene influencia sobre nuestro estado mental. La cient�fica Nazareth Castellanos en su libro Neurociencia del cuerpo. C�mo el organismo esculpe el cerebro (Ed. Kairos) nos acompa�a en este viaje a trav�s del cuerpo para descubrir su impacto sobre nuestras neuronas. Y nos descubre que "las personas con mayor consciencia corporal toman decisiones m�s acertadas".

Come bien y  aprende a respirar, te sentir�s m�s animada.
Come bien y aprende a respirar, te sentir�s m�s animada. ANTONIO TERRON TELVA

"Me siento afortunada por poder vivir una revoluci�n cient�fica que comienza a conciliar el cerebro con el resto del cuerpo", afirma la cient�fica Nazareth Castellanos. La autora de Neurociencia del cuerpo. C�mo el organismo esculpe el cerebro (Ed. Kairos), rinde homenaje en su libro al m�dico espa�ol Santiago Ram�n y Cajal, Premio Nobel en Medicina en 1906, por su descubrimiento de las conexiones neuronales del cerebro. �l describi� po�ticamente a las neuronas como "las misteriosas mariposas del alma, cuyo batir de alas qui�n sabe si esclarecer� alg�n d�a el secreto de la salud mental".

Castellanos, licenciada en F�sica te�rica y doctora en Neurociencia por la Facultad de Medicina de la Universidad Aut�noma de Madrid, es directora de investigaci�n del proyecto Interacci�n Cerebro-Cuerpo durante la meditaci�n, desarrollado en la Universidad Complutense de Madrid. En su interesante libro, trufado de inspiradoras citas literarias y de sesudos estudios cient�ficos, que alterna para facilitar la lectura del novato, describe minuciosamente elfuncionamiento del cerebro, sus conexiones el�ctricas entre axones y dendritas (neuronas emisoras y receptoras) y las funciones de las diferentes ondas (delta, theta, alfa, beta y gamma), con especial atenci�n a las ondas alfa que se encargan de la atenci�n, de facilitar la presencia, inhibiendo aquellas zonas del cerebro que no est�n involucradas en esa tarea para evitar interferencias o distracciones.

La meditaci�n y las ondas alfa

"Un maestro de meditaci�n compar� la atenci�n con la l�mpara del minero, que ilumina s�lo aquello que enfoca dejando lo dem�s a oscuras. Atender aqu� supone desatender todo lo dem�s", explica Nazareth Castellanos. Y cita a Pablo d'Ors cuando dice que la oscuridad es una luz que busca ser observada. "Mantener en la oscuridad lo que no es relevante es obra de las ondas alfa".

La memoria depende de las v�sceras

La anatom�a del cerebro es otro de los temas tratados. "En la neurociencia cada vez hay m�s consenso acerca de que el cerebro trabaja de forma integral, como una compleja red". Y esto afecta a temas como la memoria, la atenci�n, la emoci�n o el tacto. El cerebro es as� "un sistema de sistemas" que procesa toda la informaci�n que llega a nuestros sentidos a trav�s de los perceptores. Se detiene de manera especial en la memoria: "No s�lo involucra al cerebro, veremos que depende de las v�sceras". Analiza por qu� hay situaciones que se quedan en el cerebro mientras otras no permanecen. C�mo el estr�s o el trauma ayudan al olvido.

La cient�fica Nazareth Castellanos.
La cient�fica Nazareth Castellanos.

En el principio fue la homeostasis

Afirma el investigador de neurociencia Antonio Damasio que "cualquier teor�a que se base exclusivamente en el sistema nervioso para explicar la mente y la consciencia est� destinada al fracaso". Mente y cuerpo est�n interrelacionados. Fue Walter Canon, profesor de Fisiolog�a de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard, quien en 1929 public� un famoso art�culo en el que resaltaba la capacidad de los seres vivos para mantener su equilibrio interno: la homeostasis, que Castellanos define como "un malabarismo del organismo para recuperar el equilibrio ante un mundo de extraordinaria incertidumbre". La dificultad para estudiar de manera cient�fica las v�as de comunicaci�n entre las v�sceras y el cerebro ha ralentizado su an�lisis.

Los siete sentidos

Para la autora, las nuevas generaciones deben incorporar dos sentidos m�s a los cinco sentido exteroceptivos (vista, o�do, gusto, olfato y tacto) que son la interocepci�n y la propiocepci�n.

La interocepci�n es "el proceso por el cual el sistema nervioso detecta, interpreta e integra las se�ales que se originan en el organismo con el fin de generar un mapa interno constante y din�mico, consciente e inconsciente, que no es exclusivo del ser humano (...). La informaci�n llega desde el coraz�n, los pulmones, el est�mago, el intestino, la vejiga, la piel y el m�sculo esquel�tico". Una disfunci�n supone una respuesta en la salud general y mental, como ansiedad, o trastornos adictivos. "Este mapa interno se�aliza los reflejos, impulsos, sentimientos, respuestas adaptativas, experiencias cognitivas y emocionales, contribuye a la homeostasis, la regulaci�n corporal y la supervivencia". Ahora estamos aprendiendo en qu� medida la forma en que pensamos y sentimos est� determinada por esta interacci�n din�mica entre el cuerpo y el cerebro.

El estado de la microbiota influye en tu salud mental.
El estado de la microbiota influye en tu salud mental.ALFONSO ZUBIAGATELVA

El misterio de las sensaciones corporales

Hablamos ahora del sistema somatosensorial, que se ocupa del tacto y de la posici�n del cuerpo, llamada propiocepci�n, el s�ptimo sentido, para Castellanos, que detecta el movimiento, las sensaciones y la posici�n corporal a trav�s de receptores sensoriales y cinest�sicos. "Si las cicatrices ense�an, las caricias tambi�n", dice Mario Benedetti. Explica Castellanos que "cuando se analiz� la corteza somatosensorial por primera vez en 1952 se descubri�, para sorpresa de todos, que el cerebro privilegia unas zonas sobre otras". As�, por ejemplo, la espalda recibe muchas menos neuronas que el me�ique o el pulgar. Y la zona a la que el cerebro dedica m�s recursos neuronales es la cara y las manos. la lengua y la musculatura que rodea la boca son claves, de ah� la importancia de sonre�r.

Lo que el cuerpo sabe

"Pero no s�lo se interpretan las sensaciones o postura facial, el cuerpo entero es el campo donde juegan las emociones, los pensamientos, la vida". La propiocepci�n tambi�n influye en la percepci�n del entorno, nos permite comprender la actitud de los dem�s cuando observamos su cuerpo y su movimiento. "Las sensaciones corporales son recogidas en el cerebro, dando lugar a la experiencia emocional". Y el cuerpo responde incluso antes, con la respiraci�n, el latido card�aco, la postura corporal. El cuerpo sabe aquello de lo que la mente no se ha dado cuenta. Y cita Nazareth estad�sticas que muestran que "las personas con mayor consciencia corporal toman decisiones m�s acertadas".

Neurociencia del cuerpo. C�mo el organismo esculpe el cerebro (Ed. Kairos), de Nazareth Castellanos

De venta en Amazon (17,10 euros)

Comprar Producto

Una ciencia al servicio de lo humano

La autora insta a tomar conciencia de uno mismo y de nuestra salud, sin delegarla exclusivamente en los profesionales. Aunque siempre escuchando a quien sabe, convirtiendo el conocimiento en introspecci�n, con una visi�n integradora del cuerpo humano. Y aunque, dice, "la neurociencia s�lo ha incorporado la actividad intestinal, cardiaca y respiratoria -a cada una de ellas se dedica un amplio cap�tulo en el libro-, me consta que se est� estudiando la influencia que ejercen sobre el cerebro sistemas como el �tero, el h�gado, los m�sculos o la piel (...). La revoluci�n ha comenzado por los m�s fuertes, los m�s f�ciles de medir tambi�n".

Observar la actividad del intestino, la respiraci�n agitada despu�s de ejercicio, la postura del cuerpo... Todo ello es conocerse. "Comprender la biolog�a desde lo sapiencial es aprender a afinar la orquesta org�nica que llevamos dentro. Y como dec�a George Orwell, "lo importante no es mantenerse vivo, sino mantenerse humano".

En calidad de Afiliado, TELVA obtiene ingresos por las compras adscritas que cumplen los requisitos aplicables. La inclusi�n de enlaces no influye en la independencia editorial de este medio: los redactores seleccionan y analizan los productos libremente, seg�n su criterio y conocimiento especializado.

El viaje, por Pablo d' Ors