Altea logra 5 millones de los fondos Next Generation para rehabilitar 346 viviendas

Unos 24 edificios que suman 346 viviendas, la reurbanización de las calles y la creación de una oficina de la vivienda para la gestión de estas ayudas es el proyecto que pondrá en marcha la Concejalía de Urbanismo tras la concesión de estas ayudas de los Fondos Next Generation. El edil del área, José Orozco, ha declarado que “estamos muy contentos de haber obtenido esta subvención teniendo en cuenta que en total se iban a repartir 87,5 millones en toda la Comunitat Valenciana y competíamos con ciudades muy grandes, como las capitales de provincia y medianas que optaban a 10 o 7,5 millones respectivamente”. Además ha dado las gracias a todos los involucrados en este proyecto.

“Seguimos apostando por hacer de Altea un lugar más sostenible, habitable y con buena calidad de vida para la ciudadanía”, ha subrayado el alcalde, Jaume Llinares. El munícipe ha hecho hincapié en que se trata de “una apuesta por la recuperación de barrios que estaban más degradados, una ayuda a muchas familias. El objetivo es recuperar los entornos urbanos que más lo necesitan, son barrios con una buena ubicación que recuperarán atractivo”.

Las zonas que han optado a esta subvención han sido dos. Por un lado, el ensanche de la avenida que aglutina todas las calles que se encuentran dentro de la delimitación de Conde de Altea, Pont de Moncau, Zubeldía, Ferrocarril y Garganes. Y por otro, el ensanche del Pla de Castell a la avenida de La Nucia que conforman las calles que están dentro de la delimitación de la Costa de los Matxos, Calvari, Almendros, Carrasca, Alfaz de Pi y Vila Joiosa.

“Creemos que era el momento de dar un paso en la rehabilitación de estas dos zonas de Altea, dos ámbitos con características sociodemográficas y socioeconómicas muy parecidas. Son dos ensanches de los años 60 con un parque de vivienda muy antiguo con un valor inmobiliario por metro cuadrado construido del orden del 50% del valor mediano del solo urbano”, ha explicado Orozco.

El presupuesto total del proyecto se eleva a cerca de 6,1 millones. La aportación del ministerio es de 4.653.124,86 euros, la parte de la Generalitat Valenciana asciende a 272.060, la aportación municipal alcanza los 822.930 euros, y los los 280.000 restantes corresponden a los propietarios de los inmuebles.

Las actuaciones van dirigidas a la lucha contra la pobreza energética, la mejora de la calidad de vida de las viviendas y la descarbonización de la calefacción y refrigeración. El 100% de las actuaciones proponen generación de energía verde fotovoltaica; y en más del 90% se actúa en la retirada de amianto, el cambio de ventanas y la carpintería.