Terrorismo de usar y tirar: el último giro de la amnistía

Hay ciertos detalles que os delatan. Por supuesto, eso no os importa, pero no por ello hay que dejar de señalároslos.
Por ejemplo, “Tsunami”. No “Tsunami Democrátic”, solo “Tsunami”. Solo para muy cafeteros. Demasiado familiar como para que cualquier persona mínimamente crítica vea visos, no ya de objetividad porque eso en eldiario.es no lo espera nadie, sino por lo menos de mínimo rigor.
O la “acción” en el aeropuerto, relacionada con la muerte de un viajero. “Acción”, así la llamáis. Quisiera que todas las muertes accidentales o circunstanciales de otros tipos las trataseis igual. Como “acciones”.
Qué estupendos nos ponemos con cuestiones “técnicas”, como un día de retraso para continuar unas diligencias, o la pura letra de los autos judiciales (“empujar unos carritos”) pero qué poca atención a las quemas de contenedores, lanzamientos de adoquines o cortes de vías férreas y autopistas, lesiones a fuerzas de seguridad o protestas que sí convoca Tsunami Democràtic pero que en el auto inicial no están vinculadas y por tanto, aunque reales, parece que no han ocurrido si no están en el auto.
Ojalá hubierais sido tan “legalistas” con la primicia de Chiqui Montero y el novio de Ayuso, su primo el Elías Ahuja, Juana Rivas o María Sevilla. O la reciente absolución definitiva de Camps, nada menos.
Qué perdida está esta sedicente izquierda que compra por su valor facial la amnistía a un personaje como Puigdemont, de ideología reaccionaria en todo aquello que enarbola la batalla cultural y capaz de declarar la independencia de un territorio y fumarse un puro, con el único objetivo de mantenerse en el poder y el pobre sustento de que se opone a la derecha (española, claro).
Qué poca credibilidad la apelación a un juez sindicado y significado políticamente, que utiliza como argumento que otros jueces están sindicados en otra asociación y pone por ello en duda la limpieza de sus actuaciones u “otro tipo de cosas”. Le dijo la sartén al cazo.
Qué paupérrimo argumento sobre los recovecos en la tipología e interpretación penal de la amnistía por parte de los mismos que consideraban fraudulenta la amnistía fiscal de Montoro o que consideraban legítima la actuación de Garzón en los procesos contra el franquismo tras una amnistía (esta, sí, de verdad).
Qué pena de equipo de opinión sincronizada.

Para vuestro panfleto el único terrorismo es el terrorismo machista, ahí si. Lo demás son pamplinas sin fundamento. Pos vale.
¿Dar pábulo a delincuentes es una obligación para la izquierda?, porque manda huevos con la progresia.