C�MO
Religi�n
Cristianismo

Cu�les son los 10 mandamientos

Actualizado

Seg�n la Biblia, todo cristiano debe cumplir con el dec�logo de mandamientos para vivir liberado de la esclavitud del pecado

Fotograma de la pel�cula Los 10 Mandamientos de la Colecci�n de Terenci Moix.
Fotograma de la pel�cula Los 10 MandamientosEL MUNDO

Sabemos que los 10 mandamientos son un dec�logo que todo buen cristiano debe cumplir para vivir liberado de la esclavitud del pecado. Hoy en d�a, la expresi�n se ha convertido en un recurso frecuente para los titulares; ah� est�n como ejemplo los Los 10 'mandamientos' de Stephen Hawking, los 10 mandamientos para ayudar a tu hijo a ser feliz o los 10 mandamientos de la paella valenciana. Entre tanta banalizaci�n las leyes principales dadas por Dios se difuminan y cada vez son menos los que conocen cu�les son los 10 mandamientos, as� que no est� de m�s hacer un breve repaso.

Seg�n la historia narrada en el libro de �xodo, Dios escribi� con su dedo los 10 mandamientos en dos tablas de piedra y se los entreg� entre truenos a Mois�s en el monte Sina�. Son, por tanto la ley que Dios entreg� al pueblo de Israel y que hoy rigen la moral del cristianismo y del juda�smo.

Los tres primeros mandamientos est�n relacionados con el amor a Dios y los otros siete, con el amor al pr�jimo. Seg�n recoge la versi�n digital de la Enciclopedia Cat�lica, los mandamientos divinos est�n considerados obligatorios para cada criatura humana y su violaci�n se toman como una ofensa dolorosa o mortal contra Dios.

Estos son los 10 mandamientos:

1. Amar�s a Dios sobre todas las cosas

S�lo existe un Dios, creador y todopoderoso, al que adorar. "Yo, el Se�or, soy tu Dios, que te ha sacado del pa�s de Egipto, de la casa de servidumbre. No habr� para ti otros dioses delante de m�. No te har�s escultura ni imagen alguna ni de lo que hay arriba en los cielos, ni de lo que hay abajo en la tierra, ni de lo que hay en las aguas debajo de la tierra. No te postrar�s ante ellas ni les dar�s culto" (Ex 20, 2-5).

2. No tomar�s el nombre de Dios en vano

Nada de blasfemar, maldecir o jurar, pues son ofensas a Dios. "No tomar�s en falso el nombre del Se�or tu Dios". (Ex 20, 7; Dt 5, 11). "Se dijo a los antepasados: "No perjurar�s"... Pues yo os digo que no jur�is en modo alguno" (Mt 5, 33-34).

3. Santificar�s las fiestas

Habla de trabajar seis d�as a la semana, de descansar el s�ptimo para honrar a Dios y de rendir culto en los d�as de fiesta. "Pues en seis d�as hizo el Se�or el cielo y la tierra, el mar y todo cuanto contienen, y el s�ptimo descans�; por eso bendijo el Se�or el d�a del s�bado y lo hizo sagrado" (Ex 20, 11). La Iglesia, despu�s de cambiar el d�a de descanso del Sabbath jud�o, o s�ptimo d�a de la semana, al primero, fij� el domingo como D�a del Se�or.

4. Honrar�s a tu padre y a tu madre

Dios quiso que, despu�s de �l, honr�semos a nuestros padres, a los que debemos la vida y que nos han transmitido el conocimiento de Dios. "Honra a tu padre y a tu madre, para que se prolonguen tus d�as sobre la tierra que el Se�or, tu Dios, te va a dar" (Ex 20, 12).

5. No matar�s

"La vida humana ha de ser tenida como sagrada, porque desde su inicio es fruto de la acci�n creadora de Dios y permanece siempre en una especial relaci�n con el Creador, su �nico fin. S�lo Dios es Se�or de la vida desde su comienzo hasta su t�rmino; nadie, en ninguna circunstancia, puede atribuirse el derecho de matar de modo directo a un ser humano inocente" (Congregaci�n para la Doctrina de la Fe, Instr. Donum vitae, intr. 5).

6. No cometer�s actos impuros

Se refiere a las relaciones sexuales fuera del matrimonio y a otros actos considerados inmorales. "Hab�is o�do que se dijo: "No cometer�s adulterio". Pues yo os digo: Todo el que mira a una mujer dese�ndola, ya cometi� adulterio con ella en su coraz�n" (Mt 5, 27-28).

7. No robar�s

Seg�n explica el Catecismo de la Iglesia Cat�lica, "el s�ptimo mandamiento proh�be tomar o retener el bien del pr�jimo injustamente y perjudicar de cualquier manera al pr�jimo en sus bienes. Prescribe la justicia y la caridad en la gesti�n de los bienes terrenos y de los frutos del trabajo de los hombres. Con miras al bien com�n exige el respeto del destino universal de los bienes y del derecho de propiedad privada. La vida cristiana se esfuerza por ordenar a Dios y a la caridad fraterna los bienes de este mundo".

8. No dar�s falso testimonio ni mentir�s

"No dar�s testimonio falso contra tu pr�jimo" (Ex 20, 16). "Este precepto moral deriva de la vocaci�n del pueblo santo a ser testigo de su Dios, que es y que quiere la verdad", sostiene la Iglesia. "Las ofensas a la verdad expresan, mediante palabras o acciones, un rechazo a comprometerse con la rectitud moral", esgrime.

9. No consentir�s pensamientos ni deseos impuros

Se refiere a la concupiscencia, que en la moral cat�lica significa, en palabras de la RAE, deseo de bienes terrenos y, en especial, apetito desordenado de placeres deshonestos. "No codiciar�s la casa de tu pr�jimo, ni codiciar�s la mujer de tu pr�jimo, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno, ni nada que sea de tu pr�jimo" (Ex 20, 17).

10. No codiciar�s los bienes ajenos

Proh�be la avaricia y el deseo de una apropiaci�n inmoderada. "No desear�s su casa, su campo, su siervo o su sierva, su buey o su asno: nada que sea de tu pr�jimo" (Dt 5, 21). "Donde [...] est� tu tesoro, all� estar� tambi�n tu coraz�n" (Mt 6, 21).