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¿Remco y Vingegaard le temen a Tadej Pogacar en el Tour de Francia?
El esloveno, que busca el doblete en el Tour tras ganar este año el Giro, dice que está acostumbrado a que corran contra él. Hoy tendrá gran desafió en la etapa 11.
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Desde el comienzo del Tour, Tadej Pogacar (adelante) viene buscando hacer la diferencia ante sus demás rivales. Vingegaard (segundo), sin lanzar ataques, tiene una estrategia, por ahora, más conservadora. FOTO AFP
El maillot amarillo Tadej Pogacar (UAE) afirmó que sus rivales del Visma-Lease a bike, liderado por Jonas Vingegaard, tienen “miedo” de él, pero no logran debilitarlo “a nivel mental”.
“Si tratan de alcanzarme mentalmente, no lo logran”, declaró el ganador de las ediciones de 2020 y 2021 del Tour, y quien este martes, en la reanudación de la presente edición tras su primer día de descanso el lunes, sumó su octavo día al comando de la prueba.
En dicha jornada, de 187.3 kilómetros, bastante llana entre Orléans y Saint-Amand-Montrond, el colombiano Fernando Gaviria (Movistar) fue uno de los protagonistas. Por escasos metros se privó de la victoria, que quedó en poder del belga Jasper Philipsen (Alpecin). El paisa fue quinto.
Por su parte, Tadej se muestra irritado por el marcaje que encuentra de sus inmediatos perseguidores.
“Corren contra mí, fue lo mismo en los tres, cuatro últimos Tours, estoy acostumbrado”, explicó el esloveno, que no encontró colaboración en la formación neerlandesa en la etapa del domingo por los caminos blancos cerca a Troyes.
“Cuando Remco Evenepoel atacaba, el Visma no se ocupaba, estaban centrados en mí”, lamentó el ganador del Giro en mayo, en busca de un doblete histórico, que parece preferir el estilo ofensivo del belga al más pragmático de Vingegaard.
Pogacar cuenta con 33 segundos de ventaja sobre Evenepoel y de un minuto y 15 segundos sobre el danés, que regresó en la ronda gala después de varias lesiones por una caída en la Vuelta al País Vasco en abril. Aunque Pogacar reconoció que las piernas de ‘Vingo’ son buenas desde la salida en Florencia.
Jonas, por su parte, se defendió de las críticas, aludiendo a su “manera inteligente” de correr el Tour. “Si me escapo con los dos (el domingo) a 70 kilómetros de meta y después me dejan atrás en el último sector de los caminos blancos pierdo el Tour”, explicó el danés, vigente campeón del Tour.
Otra dura batalla
Ahora, tanto Tadej como Remco tendrán este miércoles una nueva ocasión de poner en aprietos a Jonas en la undécima etapa, que promete una pelea encarnizada en los montes de Cantal.
Con sus 4.350 metros de desnivel positivo en 211 kilómetros, la fracción supone un reto no menor para un pelotón que partirá de Evaux-les-Bains y concluirá su recorrido en la estación de esquí de Le Lioran (centro). Un auténtico test antes de los Pirineos y los Alpes.
“No es alta montaña, pero se puede disfrutar y atacar con puertos cortos, pero empinados”, como el Le Puy Mary, Perthus o Néronne, explicó Thierry Gouvenou, el arquitecto del recorrido, que muestra su gusto por los macizos Central, Jura o los Vosgos.
El miércoles, en el centro-oeste del macizo central, el pelotón encadenará cuatro ascensiones catalogadas en los 50 últimos kilómetros, como el col de Néronne (3,8 km al 9,1%), paso de Peyrol (5,4 km al 8,1%), col de Perthus (4,4 km al 7,9%) y Font de Cère (3,3 km al 5,8%), todos ellos entre los 1.200 y 1.600 metros de altitud.
Una jornada enmarcada por magníficos paisajes, a menudo subalpinos, especialmente del Pas de Peyrol hacia Puy Mary, vestigio del mayor estratovolcán de Europa, donde el colombiano Daniel Martínez -ausente en la presente edición- se impuso en 2020 en plena pandemia.
Sobre el papel, la etapa abre oportunidades para Pogacar y Evenepoel.
Los dos dinamitadores del pelotón, que adoran ese tipo de rampas explosivas no demasiado largas y sin tanta altitud, podrían verse tentados de poner a prueba de nuevo la resistencia de Vingegaard, porque el danés se halla más cómodo en los puertos largos y en altura, que esperan en la segunda mitad del Tour.
“Es una etapa en la que puede haber pelea por la clasificación general”, indicó Remco Evenepoel, que sueña con emular a su compatriota belga Greg Van Avermaet, que se impuso en solitario en 2016 en Le Lioran para vestirse de amarillo.
