Probamos un Porsche Cayenne con 15 años: ¿aún merece la pena?

Este Porsche Cayenne (9PA) usado, que pesa más de 2,3 toneladas, no es excesivamente opulento en términos de espacio, pero aun así está diseñado para ser adecuado como coche familiar. Y diré aún más: sobre el papel, este Porsche es el SUV perfecto. Sin embargo, una vez lo he probado, surgen algunas taras entre sus muchas virtudes. 

Motores

Dependiendo de la motorización, el Cayenne se mueve a un nivel sumamente impresionante. El motor base V6 de gasolina suministrado por Volkswagen produce 290 CV y, salvo por ocasionales cadenas de distribución algo holgadas, no presenta problemas. El V8 atmosférico en el Cayenne S y GTS (385/405 CV) es notablemente más potente, pero desafortunadamente también más sensible a las averías

El V6 diésel, que en otras marcas del grupo Volkswagen se conoce como 3.0 TDI, puede parecer aburrido a primera vista. Pero con 240 CV y un par motor abundante, debería ser suficiente para la mayoría de los interesados en el Cayenne para el uso diario. Su gran fortaleza: para su tamaño, tiene un consumo moderado entre 9 y 13 litros de diésel.

Por dentro

Los asientos estándar eléctricos son cómodos y el cuero es duradero. También había asientos deportivos disponibles por un coste adicional. El cockpit lo compone un tablero ergonómico con buena calidad al tacto y la vista, que ha aguantado bien el paso del tiempo. Todo se siente sólido. Además, añade un sistema de infoentretenimiento PCM que, eso sí, se ve algo anticuado.

El maletero tiene un volumen de carga útil de entre 540 y 1770 litros y una capacidad de carga mínima de 650 kilogramos, lo cual es muy práctico.

El Porsche Cayenne (9PA) tiene una luneta trasera que se puede abrir por separado. Esta característica ya no está disponible en los modelos de Cayenne fabricados posteriormente.

Fallos típicos

La suspensión neumática tan sofisticada le sigue proporcionando un comportamiento intachable incluso comparándolo con modelos actuales, pero su complejidad tiende a producir costosas averías con el tiempo, ya que es más propensa a fallos en los compresores y las válvulas de retención.

Además, muchos Cayenne de segunda mano han tenido que soportar un uso intensivo: con una capacidad de remolque de 3.5 toneladas, es un vehículo de remolque de primera clase, en el que se puede esperar un mayor desgaste en la transmisión y el chasis. 

En cuanto a la carrocería del Cayenne, su construcción es fundamentalmente de alta calidad, pero después de 15 años no se mantiene impoluta. A pesar de las chapas galvanizadas, algunos vehículos presentan problemas evidentes de óxido. Especialmente en los bordes inferiores de las puertas traseras y en el hueco de la matrícula del portón trasero, a menudo aparecen focos de óxido incluso en modelos de años más recientes. 

Las molduras de aluminio en las puertas también tienden a corroerse, y el techo panorámico opcional es extremadamente sensible con la edad. Los posibles problemas van desde motores defectuosos hasta desagües obstruidos, que en el peor de los casos pueden causar charcos en el área delantera del piso, en el maletero y bajo el asiento trasero.

Factores para decidir la compra

Incluso después de 15 años, un Cayenne sigue siendo un placer exclusivo. La excelsa combinación de confort, deportividad y capacidad todoterreno, eso sí, conlleva una serie de costosos riesgos. Por eso, debe comprarse con un requisito inapelable: que el libro de revisiones esté al día, e indagar el uso que le ha dado su anterior propietario. 

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Etiquetas: SUV deportivo