Prueba del Opel Astra Sports Tourer 1.2 Turbo 130
Los familiares tienen una larga tradición en Europa, pero no en España, pese a que son claramente más prácticos y cada vez más elegantes. Te contamos si nos convence el Opel Astra Sports Tourer con motor 1.2 turbo de 130 CV
El Astra Sports Tourer es un familiar que se distingue claramente del Opel Astra normal en la zaga: la matrícula aquí está situada en el portón trasero, lo que no es un truco de diseño, sino algo necesario para bajar el umbral de carga lo más posible. Este está a 62 cm del suelo, es decir, más bajo que la mayoría de sus rivales, con lo que eso te facilita la vida a la hora de llenarlo de maletas.
Ofrece de 597 a 1.634 litros de capacidad, que son valores también superiores a su competencia. Y la distancia entre ejes ha crecido seis centímetros (mide 2,73 m), lo que no sólo ha permitido montar unas puertas traseras significativamente más grandes para facilitar el acceso, sino que mejora la visibilidad.
Sin embargo, los que se sientan en la parte trasera no percibirán ningún aumento apreciable del espacio para las rodillas respecto al modelo de cinco puertas. Una lástima, porque hay coches de la competencia que salen mejor parados en estas lides. Al menos queda el consuelo de que los asientos delanteros son muy cómodos (tienen certificación AGR -en favor del cuidado de tu espalda-), tienen múltiples posibilidades de reglaje y te abrazan casi con el mismo cariño que una abuela a sus nietos.
Esta unidad de pruebas del Opel Astra Sports Tourer monta el motor 1.2 Turbo de tres cilindros con 130 CV y 230 Nm de par, que a priori es potencia más que suficiente para todo tipo de usos, aunque al conducirlo da la impresión de que a bajas vueltas le falta un poco de fuelle y que se lo piensa unos instantes para empezar a empujar con ciertas ganas después de engranar las marchas.
Este efecto desaparece si lo llevas alto de revoluciones, pero eso, como es lógico, hace que el consumo se eleve. En esta prueba el gasto medio ha sido de 7,0 l/100 km, que no es un mal dato, pero tampoco bueno. Todo esto me lleva a recomendarte el cambio automático, que he probado en el Astra de 5p. Sí, es 1.800 euros más caro, pero al gestionar la potencia por sí mismo, mejora el agrado de conducción.
En cuanto a su comportamiento de este Opel, destaco que la dirección asistida es demasiado suave, aunque hay que reconocer que en ciudad, con un radio de giro de solo 11,1 m te pone las cosas fáciles a la hora de aparcar. Y eso siempre se agradece al moverte con un coche que mide 4,64 metros de largo, que no es poco.
Por su parte, la suspensión de este Opel Astra Sports Tourer 1.2 Turbo 130 de la prueba es bastante neutra, aunque si tuviera que definirla de alguna manera diría, que es más bien blanda: es decir, ideal para viajar.
Valoración
Me convence por su amplio maletero y por su confortable chasis, aunque este motor, unido al cambio manual da impresión de quedarse corto. Mejor con transmisión automática. El precio, con los actuales 3.500 euros de descuento promocional, no está nada mal.
Lo mejor
Los asientos delanteros son muy cómodos. Capacidad del maletero. Radio de giro de solo 11,1 m.
Lo peor
A bajas vueltas le falta fuelle. El espacio para las rodillas está bien, pero en algunos de sus rivales es mayor.
Etiquetas: coches familiares
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