Alfonso Guerra: “Esta amnistía es la condena de la Transición, pido que no la hagan porque es muy grave”

Dos exponentes históricos del PSOE rechazan la amnistía exigida por los líderes del independentismo catalán a cambio de facilitar la investidura de Pedro Sánchez. Si el martes el expresidente del Gobierno Felipe González afirmó que “ni la amnistía ni la autodeterminación caben en la Constitución” durante una entrevista en Onda Cero, el que fuera vicepresidente en su Ejecutivo, Alfonso Guerra, se ha sumado este jueves a dicha postura al ser preguntado en la Cope al respecto. Para Guerra, la amnistía es una “condena de la Transición”. Y no ha dudado en calificar de “infamia” la reunión de Yolanda Díaz con Carles Puigdemont celebrada en Bruselas el lunes.

Mano derecha de González en La Moncloa entre 1982 y 1991, Guerra ha declarado que la amnistía no es solo ilegal e inconstitucional, sino “injusta” e “impura”. Y conceder la amnistía a los líderes del procés supondría para él una ruptura del régimen democrático iniciado hace 45 años: “Las amnistías se conceden para borrar el pasado. Cuando se hizo en 1977 el objetivo era borrar la dictadura y comenzar la democracia. Si ahora borramos los delitos de los independentistas, estaremos acabando con esta etapa democrática”.

Sus críticas se extienden a la líder de Sumar y vicepresidenta segunda en funciones, Yolanda Díaz, que viajó a Bruselas el lunes para reunirse con el expresident Puigdemont, encuentro en el que se comprometieron a “explorar todas las soluciones democráticas para desbloquear el conflicto político” en Cataluña. Según Guerra, esta reunión supuso una “infamia contra la democracia” que pone “patas arriba todo aquello en lo que cree un demócrata”.

El exvicepresidente se ha mostrado especialmente duro con el expresidente catalán fugado en Bélgica: “Este señor dio un golpe de Estado, declaró como república independiente una zona del país y luego se fugó cobardemente a Waterloo como un gánster de poca categoría para evitar que la justicia le exija responsabilidades”.

Guerra ha advertido de que plegarse a las exigencias del independentismo es una mala idea, ya que las pretensiones nacionalistas van a aumentar con cada concesión: “Primero fueron los indultos, luego el delito de sedición, después rebajamos el de malversación, ahora es la amnistía, después vendrá la autodeterminación y finalmente, el referéndum. Y así es como se va destruyendo la sociedad construida democráticamente en 1978″, subrayó.

Para el ex número dos de La Moncloa, resulta “intolerable” que un partido que obtuvo el 1,6% de los votos en las últimas elecciones generales lleve la batuta política del país. Guerra considera que no es comprensible que PP y PSOE, que aglutinaron el 73% de los votos en los comicios, sean incapaces de ponerse de acuerdo para reducir el “protagonismo injusto” que los partidos nacionalistas ejercen sobre el conjunto de la sociedad: “Se habla mucho de grandes pactos de Estado, pero tan solo hace falta entenderse en algunas cuestiones básicas. No es posible que unos pocos decidan sobre el 100% de los españoles”.