La gira de Baptistao

Una de las exigencias que más remarca Diego Pablo Simeone es la aportación goleadora de los centrocampistas. Baptistao no lo es, pero tampoco es un delantero puro. Tiene un punto de futbolista inclasificable. Es intermitente para conectar en el juego de construcción y para la brega arriba, pero tiene la virtud de aparecer para decidir partidos. Su poderosa zancada dirigida al espacio libre ya le hizo asomar en el Rayo Vallecano ese potencial goleador que se le intuye.

Los dos goles que le dieron la victoria al Atlético ante el Nacional en su último partido de su gira suramericana refrendaron esa capacidad del brasileño para llegar desde la segunda línea. En el primer tanto recogió un rechace tras una buena combinación en banda y una incursión con disparo del Cebolla Rodríguez. En el segundo, engarzó un disparo ajustado desde la media luna del área. Con esos dos tantos y el que marcó en Burgo de Osma, Baptistao se ha convertido por el momento en el máximo goleador del Atlético en la pretemporada. A falta de Villa, será interesante ver cómo puede acomodar Simeone a Baptistao si este sigue reivindicándose con goles, que son un argumento de peso en la cabeza del técnico cuando idea los equipos.

Nada más anunciar su fichaje por el Atlético, la rumorología de que Baptistao podría entrar en alguna operación se disparó. Sin embargo, Simeone, como mínimo, quería verlo en la pretemporada. Terminada esta gira por Suramérica (una derrota y dos victorias) el brasileño afronta el último tramo de la temporada muy reforzado. Él y la agradable sorpresa que ha supuesto el rendimiento de Dani Aquino han sido las notas más relevantes para un equipo que en la derrota contra Estudiantes de la Plata (1-0) y en el primer tiempo de ayer volvió a evidenciar que le falta un futbolista que aporte algo diferente con la pelota en el juego de ataque. El mismo mal del curso pasado. La pinta de equipo aguerrido sigue vigente. Esa es innegociable para Simeone.