Rechazado en el Congreso el intento de destitución contra Montes, el ministro de Vivienda de Boric

La Cámara de Diputados chilena ha rechazado este jueves el intento de destitución levantado por la oposición al Gobierno de Gabriel Boric contra el ministro de Vivienda, el socialista Carlos Montes, en el marco del caso Convenios. El proceso de acusación constitucional, el instrumento para lograr su salida del Gabinete, arrancó con la votación de la cuestión previa, es decir, la improcedencia de la acusación. Mientras 79 diputados la consideraron improcedente, solo 61 que la estimaron pertinente. Es la quinta vez consecutiva que la derecha en esta Administración ha fracasado en su intento de botar a algún ministro del Ejecutivo y supone una derrota especialmente para la ultraderecha del Partido Republicano y el Social Cristiano, las fuerzas políticas que empujaron el proceso de destitución por las responsabilidades políticas que, según estas bancadas, le cabrían al ministro Montes por liderar la cartera donde se ha concentrado la trama de corrupción.

“Tengo las manos y la conciencia limpia”, dijo el socialista desde el Congreso, arropado por ministros y parlamentarios oficialistas. “Se probó que no tenía ni fundamentos técnicos ni políticos”, aseguró Montes, un histórico de la izquierda tradicional. El Gobierno de Boric logró el rechazo de la acusación constitucional con el apoyo no solo del oficialismo, sino con los votos de la Democracia Cristiana, el Partido de la Gente y Demócratas, que no forman parte del Ejecutivo.

Lo que se votó este jueves en el Parlamento, con sede en Valparaíso, a unos 120 kilómetros de Santiago de Chile, deja sin efecto la acusación constitucional, que queda como jamás presentada.

El presidente Boric escribió en la red social X que por quinta vez, una acusación constitucional contra un integrante del Gobierno es desestimada. “Ministro Carlos Montes, tiene mi confianza para seguir trabajando en la noble tarea de entregar 260.000 viviendas en nuestro período. No hay tiempo que perder. ¡Seguimos!”, indicó el mandatario chileno.

La portavoz del Gobierno de Boric, Camila Vallejo, que acompañó a Montes esta jornada en el Congreso, entregó un mensaje luego de la votación de la cuestión previa: “Es momento de pasar al diálogo, a los acuerdos y dejar atrás la confrontación que no lleva a ningún lado. Es lo que ha pedido y reafirmado categóricamente también la ciudadanía en las últimas semanas”, dijo la ministra en referencia al plebiscito del 17 de diciembre. La lectura que ha hecho el Gobierno del referéndum –que por un 55% contra un 44% rechazó una propuesta de las derechas– apunta a que la ciudadanía quiere llegar a acuerdos y castiga la falta de consensos.

“El ministro Carlos Montes ha mantenido el cumplimiento de una importante tarea y hoy día va a tener, además, una dedicación exclusiva para poder avanzar en esa tarea tan importante para nuestra gente: enfrentar la emergencia habitacional que tiene nuestro país, seguir entregando viviendas”, aseguró la ministra Vallejo, que ha apuntado además a las otras dos urgencias que tiene el Gobierno para su segunda mitad de mandato, la reforma de las pensiones y el pacto fiscal, necesario para financiarla.

El rechazo de la acusación contra Montes supone su permanencia en el Gabinete, un hecho que constantemente estaba en duda a medida que se conocen nuevas aristas del caso Convenios, una trama de traspasos de dineros públicos a fundaciones privadas ligadas al oficialismo. El ministerio donde se concentraron mayoritariamente estos casos ha sido Vivienda, en programas dedicados a trabajar en barriadas pobres. Mientras la oposición acusa responsabilidades políticas del ministro Montes, el oficialismo ha defendido que no ha estado involucrado en el caso, protagonizado sobre todo por militantes de Revolución Democrática del Frente Amplio, y que desde el primer momento ha tomado medidas.

Una eventual salida de Montes, explican desde La Moneda, habría significado una ruptura entre las dos coaliciones del presidente Boric: Apruebo Dignidad (el Frente Amplio y el Partido Comunista) y el Socialismo Democrático (integrado por el Partido Socialista, al que pertenece Montes, y otras fuerzas de la izquierda moderada).