Massa lleva a Milei al barro en el último debate presidencial en Argentina:“¿Margaret Thatcher es tu ídola?”

Argentina ha entrado en la semana final de una elección presidencial que tuvo cinco meses de campaña, dos corridas cambiarias, denuncias de fraude sin fundamentos y dos elecciones preliminares que han dejado cara a cara al peronista Sergio Massa y al ultra Javier Milei en una segunda vuelta el próximo 19 de noviembre. Los candidatos tienen ya pocas cosas nuevas para decirse, y el debate de este domingo lo ha dejado en claro. Entre el actual ministro de una economía en crisis y un outsider que llegó hasta esta instancia criticándolo, los papeles se invirtieron: Massa dedicó el debate a correr a Milei por las propuestas que dice ya no querer llevar a cabo, y Milei cayó en el fango para defenderse.

A continuación, algunos momentos destacados del debate.

“El debate es largo, no te pongas agresivo”

Los argentinos especularon durante las últimas semanas si Milei estaría dispuesto a presentarse a un debate con nuevas reglas: en el cara a cara de este domingo, los candidatos no tenían permitido llevar apuntes y podían interrumpirse. Massa lo usó a su favor en el bloque en el que tenía más chances de perder: el de Economía, que inauguró el debate con la intervención de Milei. Tenían seis minutos cada uno, y Massa lo acorraló con preguntas sobre el programa que presentó ante la Justicia Electoral: si iba a eliminar subsidios, privatizar los yacimientos de gas y petróleo del Estado, privatizar ríos y mares, o dolarizar la economía y eliminar el Banco Central.

“Vos sos un mentiroso. Si fueras Pinocho ya me hubieras lastimado un ojo”, llegó a replicar el economista, que gastó casi todos sus minutos en atacar al Gobierno del que Massa es ministro de Economía. “Nos reventaste los ingresos”, dijo Milei. “Con vos como ministro cayeron un 33% los ingresos, que ya venían cayendo con [Mauricio] Macri”, replicó el ultra, que terminó golpeando al expresidente que le dio su apoyo hace menos de dos semanas. “Lo primero que te voy a dar un consejo. No te pongas agresivo porque el debate es largo y la gente espera respuestas”, zanjó Massa. “No te agredí, solo expreso con pasión la indignación que genera un Gobierno que nos viene destrozando la vida a todos”, respondió Milei.

“Tenés que decir claramente: ¿Margaret Thatcher es tu ídola?”

Las relaciones exteriores alzaron vuelo en la campaña después de que Milei afirmara en cada oportunidad que tuvo que rompería relaciones bilaterales con “Gobiernos comunistas”, entre ellos China y Brasil, los mayores socios comerciales de Argentina. “La política exterior no se puede regir por caprichos, se debe regir por interés nacional”, le lanzó Massa. Milei alcanzó a contestar que “era falso” y que “las relaciones las establecen los privados”.

“Viniste a desmentirte de lo que dijiste en la campaña, por eso la gente te tiene miedo”, replicó Massa, y siguió pegándole: “Tenés que decir claramente: ¿Margaret Thatcher es tu ídola?”.

La guerra y la soberanía en las islas Malvinas también había entrado en la campaña después de que la posible canciller de Milei afirmara en una entrevista con un diario británico que “respetaría la voluntad de los habitantes de las islas en una futura negociación”, un dedo en la llaga más profunda de la política exterior argentina. Massa volvió a aprovecharse del archivo. Milei había reivindicado en una de sus incontables tertulias televisivas de los últimos años a la primera ministra británica que se construyó como la “dama de hierro”. “Fue una gran líder”, se limitó a decir este domingo. “Thatcher es una enemiga de la Argentina, ayer, hoy y siempre. nuestros héroes son innegociables por más que para vos sea una figura Thatcher”, respondió Massa.

“Javier, vos trabajaste en el Banco Central ¿Por qué no te renovaron la pasantía?”

Massa llevó el debate a donde lo necesitaba. El ministro de una Economía en crisis tiene pocos triunfos que ofrecer, y ha intentado en las últimas semanas mostrarse como el político sensato y dialoguista que puede gobernar el país, a diferencia del verborrágico economista. “Esto es vos o yo. Los argentinos tienen que elegir quién tiene la templanza, la capacidad, el equilibrio mental, el contacto con la realidad para llevar a cabo lo Argentina”.

“¿Acaso vos lo tenés?”, replicó entre risas Milei, en una de sus breves victorias de la noche. Massa le preguntó si se haría un examen psicotécnico, necesario para firmar un contrato laboral en Argentina. “Por qué me negaría a hacerlo, si lo hice siempre que entré en una empresa. Vos que viviste siempre del Estado no lo hiciste nunca”, le replicó Milei. Massa lo chicaneó: “Javier, vos trabajaste en el Banco Central ¿Por qué no te renovaron la pasantía? Contale a la gente”, sin aclarar que información manejaba. “Quizás vos tampoco lo hubieras pasado”, alcanzó a responder Milei.

“Mi libro fue prologado por Rudolph Giuliani”

La campaña electoral giró a la derecha, y no solo por las propuestas ultra de Milei. Massa representa hoy al peronismo que gobernó 16 de los últimos 20 años alineado a la izquierda regional, pero su mayor éxito político lo tuvo por sus políticas de seguridad como intendente de Tigre, un pequeño municipio al norte de Buenos Aires. Massa lleva años enarbolando la bandera de la mano dura contra la delincuencia, pese a que hoy pertenece a un Gobierno que descree de ella. El ejemplo más claro es su relación con el antiguo abogado de Donald Trump, Rudy Giuliani, que en una vida pasada fue el alcalde de Nueva York que redujo la delincuencia y se puso al frente de la reconstrucción tras el atentado contra las torres gemelas.

Milei tomó a Giuliani como ejemplo de cómo enfrentar “el desastre” de la inseguridad en Argentina. Massa se relamió: “Una enorme alegría, vamos a tener una coincidencia”, respondió. “El libro que cuenta lo que hice en Tigre está prologado y fue presentado acá en Argentina por Rudolph Giuliani”.

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