La inteligencia terrestre allana el camino hacia un futuro climáticamente neutro
Las actividades de investigación e innovación en este ámbito aportan soluciones prácticas que repercuten con eficacia en el impulso de la transición hacia una economía y una sociedad resilientes y climáticamente neutras, en consonancia con el Pacto Verde Europeo. El cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la degradación del medio ambiente amenazan nuestro mundo. El Pacto Verde Europeo aborda estos retos polifacéticos marcando el camino para transformar la Unión Europea (UE) en una economía circular, eficiente en el uso de los recursos, climáticamente neutra y competitiva. La UE fija objetivos ambiciosos para hacer frente a los retos ambientales y llevarlos a la práctica con una serie de instrumentos jurídicos, por ejemplo la Ley Europea del Clima. Además, la UE quiere disociar el crecimiento económico del uso de los recursos, reducir la contaminación y garantizar el suministro de alimentos sanos, preservando al mismo tiempo la biodiversidad. La consecución de estos ambiciosos objetivos requiere la participación activa y el compromiso de los ciudadanos, los responsables políticos y las empresas por igual. Además, el clima, ya de por sí cambiante, añade un nivel de complejidad a esta ecuación, ya que las condiciones ambientales y las posibles repercusiones de una decisión son un objetivo variable. Para proporcionar información práctica, necesitamos datos y modelos sobre el estado y la evolución del sistema terrestre en su conjunto y de sus distintas partes, como los centros urbanos, los bosques o las tierras agrícolas. Aquí es donde entran en juego las observaciones ambientales. Este término se refiere a los datos de la vida real, medidos o detectados por sensores en tierra, agua y aire o por satélites. En este contexto, la ciencia ciudadana también desempeña un papel fundamental como complemento de los sistemas de observación gestionados por las autoridades o los investigadores. Al implicar a los ciudadanos, no solo recopilamos datos valiosos, sino que creamos un sentimiento de propiedad y responsabilidad hacia nuestro planeta. Los datos ambientales procedentes de todas estas observaciones, junto con los datos y modelos socioeconómicos, pueden proporcionar conocimientos e ideas útiles y adaptados a los usuarios, lo que se conoce como «inteligencia terrestre». Desarrollar y ampliar las aplicaciones de observación ambiental hacia la inteligencia terrestre requiere un planteamiento integrado que combine los puntos fuertes de los investigadores, desarrolladores e industria europeos. La iniciativa EuroGEO, iniciativa regional europea dentro del Grupo de Observación de la Tierra (GEO, por sus siglas en inglés), actúa como incubadora para la creación conjunta de soluciones con los usuarios, como las empresas que necesitan sistemas de apoyo a la toma de decisiones para mejorar el rendimiento ambiental y económico de sus operaciones. La Secretaría de EuroGEO apoya la coordinación y conecta a todos los agentes, incluido el sector privado, lo que facilita el aprendizaje mutuo, la difusión de buenas prácticas y el desarrollo de modelos empresariales de éxito para las aplicaciones de inteligencia terrestre en Europa. En este Results Pack de CORDIS se presentan once proyectos de investigación de Horizonte que proporcionaron herramientas y servicios a medida para que las empresas dominen su transición ecológica. Los objetivos del Pacto Verde Europeo se apoyan ayudando a las organizaciones a ahorrar energía, reducir emisiones, salvaguardar la biodiversidad y desarrollar soluciones sistémicas que aporten múltiples beneficios y protejan sus operaciones contra amenazas como los incendios forestales o los fenómenos meteorológicos extremos. En los proyectos VITIGEOSS, NextLand y ENVISION se integraron datos de Copernicus y de la Red Mundial de Sistemas de Observación de la Tierra (GEOSS) con otras fuentes y sensores para apoyar la agricultura y la silvicultura sostenibles. Los incendios forestales son cada vez más frecuentes y devastadores debido al aumento de las condiciones extremas de sequía en muchas regiones como consecuencia del cambio climático. El equipo de SAFERS ha desarrollado un sistema de gestión de emergencias debido a incendios forestales que utiliza datos de observación de Copernicus y GEOSS, combinados con datos de redes sociales, detectores de humo y aplicaciones móviles. En ILIAD se combinaron datos masivos con informática avanzada para crear un gemelo digital del océano, que ayuda a los científicos a comprender y predecir mejor los efectos de las actividades humanas y el cambio climático. Este trabajo está relacionado directamente con la replica digital del océano europea. El equipo de SUSTUNTECH utilizó conocimientos de investigación, soluciones comercializadas y datos proporcionados por sistemas de satélite de observación de la Tierra para hacer más sostenible la industria atunera. La contaminación atmosférica es el mayor riesgo medioambiental para la salud en Europa. Los equipos de CompAir, I-CHANGE y SOCIO-BEE colaboraron con aficionados a la ciencia para vigilar la contaminación atmosférica local y el comportamiento humano ante el cambio climático. En HARMONIA se crearon herramientas para predecir las repercusiones de los efectos del cambio climático y mejorar la preparación de las ciudades para responder a fenómenos específicos como inundaciones y tormentas de polvo. Por último, el equipo de EIFFEL utilizó tecnologías avanzadas para mejorar la calidad y resolución de los datos de los satélites de observación de la Tierra y hacerlos más accesibles y aplicables para todos.
