Las icónicas zapatillas Samba y Gazelle disparan a Adidas en Bolsa

Unas semanas después de presentar las primeras pérdidas en 30 años, llegan buenas noticias de Adidas. La marca deportiva, que ya anticipó fuertes ventas para sus zapatillas más icónicas, registró este miércoles una subida del 8,64% en la Bolsa de Fráncfort tras presentar unas cuentas del primer trimestre que han superado las expectativas más optimistas. Y no solo eso, sino que además ha mejorado sus previsiones de beneficios para el conjunto del año. El motivo: el furor que siguen provocando los modelos Adidas Terrace, los diseños Samba, Gazelle y Spezial que han sido tendencia de moda desde hace meses.

Adidas registró en el primer trimestre una cifra de negocio de 5.458 millones de euros, un 4% más, con un crecimiento del 8% sin tener en cuenta los tipos de cambio. El resultado operativo se situó en 336 millones, cinco veces más que los 60 millones de euros que registró un año antes y el margen bruto aumentó 6,4 puntos, hasta el 51,2%.

“Como resultado de unos resultados mejores de lo esperado durante el trimestre, la empresa ha aumentado sus previsiones para todo el año”, señaló Adidas en una nota a los inversores en los que adelanta cifras de los primero tres meses del año. El grupo de ropa deportiva espera ahora que los ingresos aumenten a una tasa de un dígito “medio a alto” en 2024 cuando anteriormente preveía un alza a una tasa de un dígito “medio”. Por su parte, espera que el beneficio operativo alcance 700 millones de euros frente a los 500 millones previstos con anterioridad (un 40% por encima).

Aún así, los analistas consideran que estas cifras podrían ser incluso superiores. “El mercado claramente no se cree la previsión de EBIT, que a nosotros nos parece poco realista, y excesivamente conservadora”, señalaron los analista de RBC, a Reuters. Esta firma de análisis considera que las estimaciones de consenso ya se sitúan en torno a los 890 millones de euros para 2024.

Adidas empieza a dejar atrás el efecto de la brusca ruptura con el rapero Kanye West, que se hace llamar Ye, y que le llevó a generar pérdidas el año pasado por primera vez en tres décadas. En una nueva estrategia diseñada por el CEO Bjorn Gulden, Adidas ha retomado las ventas de su línea Yeezy ara tratar de dar salida a los diseños que comercializaba con el cantante. Según la empresa, las ventas de Yeezy generaron ingresos de unos 150 millones de euros y un beneficio de explotación de unos 50 millones en el primer trimestre. En sus previsiones, la empresa asume que la venta del resto del inventario de Yeezy durante el año será al coste. Esto supondría unas ventas adicionales de unos 200 millones de euros y ninguna contribución adicional a los beneficios durante el resto del año.

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