Tanto si tu oficina está en la sala de tu casa como en un cubículo de un rascacielos al otro lado de la ciudad, tener los mejores vestidos de trabajo es una solución de eficacia probada para sentirte concentrada en cualquier entorno. ¿Cuáles son los mejores vestidos para Primavera-Verano 2024? Nos gustan especialmente las siluetas de largo midi, que se sienten como en casa durante reuniones, presentaciones de proyectos y entrevistas con el jefe o los miembros del equipo. Un vestido elegante siempre ascenderá en el ranking de tu ropa de oficina, incluso mejor si refleja tu sentido personal del estilo.
Sea cual sea la estación del año, un número elegante y minimalista siempre causa una buena impresión. En los meses más fríos, un diseño de cuero puede sorprenderte por su aire profesional. Del mismo modo, las siluetas envolventes clásicas combinan a la perfección con todo, desde sandalias y zapatos planos hasta botas y tacones, tanto si te gustan las modernas siluetas de plataforma como las encantadoras Mary Janes. No importa el combo que elijas, ya sea vestido con botas, o vestido con sandalias, puedes elevarlo con los accesorios correctos.
Para un look ultra abotonado, haz un guiño a los trajes de sastrería y a los vestidos con cinturón con un poco de estructura y diseño. Un cuello de polo que hace un guiño a la preparación icónica (combinado con mocasines) es, sin duda, el acabado definitivo. Si tu código de vestimenta es permisivo, los vestidos de punto y los estilos estampados, desde las rayas hasta los motivos florales y los patrones abstractos, ganarán a lo grande.
Sea cual sea tu gusto o tu entorno de trabajo, seguro que encuentras unos cuantos aciertos en la edición de los mejores vestidos de trabajo que te presentamos a continuación.
¿Qué vestidos comprar para ir a la oficina en Primavera-Verano 2024?
Los vestidos midi minimalistas son sofisticados y perfectos para ir a trabajar. Moderniza tu colección con pequeños vestidos negros, como los de Totême y The Row, o opta por una versión de canalé muy elegante, como la de Gabriela Hearst. Por supuesto, las siluetas de cuello alto y redondo nunca fallan en cuanto a sofisticación.
Los vestidos camiseros son todo un icono, se popularizaron en los años 60 y son la base de muchas colecciones de ropa de trabajo. Para la próxima temporada, piensa en renovar tu surtido con modelos primaverales de mezclilla o algodón popelín, como los de Cos y Proenza Schouler. Las opciones con cuello y mangas abullonadas, como las de Alexis y Tory Burch, son una de nuestras mejores elecciones cuando se busca más detalle.
Un vestido con cinturón no sólo define tu figura con belleza, sino que también aporta estructura a tu look. Las opciones son muy variadas, desde los diseños de inspiración retro de Gucci hasta los atrevidos cinturones de Alaïa. Puedes encontrar cinturones más finos en Ulla Johnson y Ralph Lauren.
Un básico de armario desde los años 30 y 40, el vestido envolvente es otro estilo de trabajo por excelencia, desde las versiones de algodón y seda acanalada (los estilos de Veronica Beard y Cos son ejemplares) hasta los encantadores estampados de Dries van Noten.
Vestido de punto
Los vestidos de punto sí que funcionan en el trabajo. Opta por largos más largos, escotes más pronunciados y detalles elegantes, como faldas plisadas o un cuello elegante: mira el midi fluido de Joseph o el estilo polo acanalado de Staud. Las opciones más voluminosas, como el modelo Daniela de The Row, son ideales para el invierno bajo un abrigo largo.
Los vestidos ajustados son una silueta más tradicional que se adapta especialmente bien a un código de vestimenta formal. Sin embargo, no tienen por qué ser aburridas, con elementos como un escote escultural, detalles en la cintura y líneas minimalistas de corte impecable. Theory, Victoria Beckham y Wardrobe NYC confeccionan algunos de los más frescos de esta temporada.
Los estampados son la mejor forma de mostrar tu personalidad en el lugar de trabajo, desde los atemporales tie-dyes (¡hola, Altuzurra!) hasta los estampados animales perfeccionados por Victoria Beckham y los ingeniosos juegos de patrones de Proenza Schouler y Bite Studios.
Ningún vestido de trabajo se adapta mejor al tiempo fresco que uno confeccionado en popelín de algodón estructurado en colores lisos atemporales como el negro y el azul Oxford o en tonos terrosos como el verde caqui. Stella McCartney, Wardrobe.NYC, Destree y Cos ofrecen algunos de nuestros favoritos de esta temporada.
Artículo publicado originalmente en Vogue US, vogue.com.