Algunos de los resquicios de los recuerdos en el trennochador de la decada de los 90 T.A
Las inolvidables noches de verano de los 90 en el Trennochador

Las inolvidables noches de verano de los 90 en el Trennochador

El servicio ha vuelto este 2024 todas las madrugadas de viernes y sábado hasta el 31 de de agosto

Ángel G. Jiménez

Viernes, 5 de julio 2024

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En la década de los 90 la oferta cultural y de ocio nocturno en la ciudad de Alicante fue una única oportunidad para explorar, perseguir y disfrutar la experiencia directa de esas largas y calurosas noches de verano en lugares como San Juan, Benidorm o Denia. Llenos de locales como el Voy Voy, el Penélope o el mítico Gallo Rojo de El Campello. Sin embargo, lo que unía a esos puntos cardinales de música era el trennochador.

El Trennochador, ahora conocido como Tramnochador, se puso en marcha por primera vez por parte de Ferrocarriles de la Generalidad Valenciana (FGV) el 8 de julio de 1988. Después de 36 años, el Tramnochador ha vuelto este viernes a dar servicio durante las madrugadas de julio y agosto en un servicio que se ha convertido en imprescindible.

La idea surgió para promocionar la línea Alicante-Denia que se encontraba en una situación difícil, con escasos viajeros y unas instalaciones en proceso de modernización.

El día que se estrenó dicho servicio llegó a contar con 195 viajeros, según datos recogidos en la Memoria de FGV de ese año. No obstante, una semana después alcanzó los 549, y después de 15 días alcanzando los 1.626 viajeros. Lo que pasó después fue fantasía.

Era una especie de Cercanías que ya nadie se acuerda del color porque iba lleno de graffitis. «Mis amigas y yo estabamos en una zona de El Campello tranquila, entonces lo único que queríamos en ese momento era salir de fiesta» recuerda uno de los muchos pasajeros que subieron a ese tren. Y añade: «Nos hacía un buen papel para acercanos a pubs como el Voy Voy o el Penélope en la playa de San Juan», recuerda una de las pasajeras que tuvo la suerte de subirse a ese tren.

Durante el viaje ibas sentado y hablabas con todo el mundo. Era una vida bastante sociable comparado con la que ahora vemos en el Tram, donde la mayoría tiene los ojos fijados a una pantalla luminosa. Se podía fumar e,incluso, te podías hacer amigo del revisor si cogías confianza: «A mi amiga una vez le dieron la banderita para avisar al revisor por la ventana que ya se había subido todo el mundo».

Reportaje que se hizo en su momento de las vivencias en el trennochador T.A

Tenías la posibilidad en una noche de estar de fiesta en San Juan y acabar en Benidorn o viceversa. Siempre había gente esperando en la parada. «En algunas paradas tenías que cruzar un descampado a oscuras. Que si ahora lo pienso, no nos paso algo porque Dios es bueno».

A la vuelta, muchas noches ibas más perjudicado de lo normal y tenías que sacar la cabeza por la ventana no vaya a ser que dejases un regalo el revisor. Los horarios iniciales entre Alicante y El Campello fueron de 23 horas a las 5 de la madrugada y de 22.55 horas a 4.30 horas en dirección contraria.

«Una vez, incluso, llegamos a celebrar allí un cumpleaños Y, claro, tú empiezas cantando: 'Cumpleaños feliz, cumplea...' y ya todo el vagón te sigue. En eso tampoco a cambiado mucho la cosa. El español es fiestero por naturaleza, y cualquier excusa era y es buena para cantar, bailar y gozar».

Estos servicios nocturnos se han actualizado con lo que conocemos ahora como el Tram, y dicho servicio empezará este viernes 5 de julio, pudiendo disfrutar de todas sus correspondientes líneas los viernes y sábado hasta el 31 de de agosto.

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