Demi Lovato le está dando un respiro a su corazón después de su apasionante compromiso.
La cantante de “Give Your Heart a Break”, de 28 años, está “bien” después de tomar la “difícil decisión” de poner fin a su breve compromiso con Max Ehrich, de 29 años, después de llegar a creer que estaba “tratando de avanzar en su carrera usándola nombre a sus espaldas “, dijo una fuente a People.
“Fue difícil para Demi admitir que cometió un error cuando se trataba de Max”, dijo la fuente al medio.
People informó por primera vez sobre la separación de la pareja el jueves, poco más de dos meses después de que se comprometieron en Malibú. La pareja comenzó a salir cuatro meses antes.
“Fue muy doloroso para Demi cuando se dio cuenta de que las intenciones de Max no eran genuinas”, dijo a People otra fuente cercana al ex alumno de Disney Channel. “Romper el compromiso no fue una decisión fácil”.
Cuando la pareja comenzó a verse hacia el comienzo de la pandemia de coronavirus y las cuarentenas, una fuente señaló que estuvieron “básicamente juntos las 24 horas del día, los 7 días de la semana durante meses”, durante los cuales la pareja “vivió en una burbuja sin estrés y todo fue simplemente divertido”.
Cuando el actor de “Young and the Restless” fue a Atlanta para filmar la película “Southern Gospel”, la fuente dijo que “saltó a la fama” y “se involucró en [Hollywood]”, lo que afectó la relación.
En una historia de Instagram durante el fin de semana, Ehrich afirmó que se había enterado de la ruptura a través de los medios y escribió: “Imagínese averiguar sobre el estado de su relación a través de un tabloide”.
El entorno de Lovato negó las afirmaciones, y una fuente le dijo a People que la cantante de “Sorry Not Sorry” “hizo que Max se diera cuenta de que la relación había terminado y que iba a salir a la luz en la prensa”.
Dejando a un lado el drama, Lovato, quien ha hablado con franqueza sobre sus problemas de salud mental y su historia con la adicción, está “bien”, dijo una fuente, y agregó que la separación es “algo bueno”.
-Traducción por José Luis Sánchez Pando/TCA
