Receta de Risotto con achicoria roja

Entre los mil platos que ofrece la cocina tradicional italiana, el risotto es uno de los más exquisitos y reconocidos a nivel internacional. La cremosidad, textura y sabor del risotto convierten a este plato en uno de los preferidos de niños y adultos, que pueden degustarlo de muchos sabores distintos. Si, más allá de su agradable sabor, quieres que este plato aporte un plus de nutrición a tus hijos, prueba en prepararlo con verduras y hortalizas, ricas en vitaminas y minerales.

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Seguidamente, te ofrecemos un sencillo paso a paso para llevar a cabo una receta de risotto con achicoria roja, una hortaliza con muchas propiedades nutritivas para tu hijo y que, mezclada con el arroz, aporta un sabor agradable y diferente al risotto.

1. ​Cocer la achicoria durante cinco minutos en agua con sal.
2. Escurrirla y cortar las hojas más grandes.
3. Sofreír el diente de ajo en una cacerola con tres cucharadas de aceite.
4. Saltear la achicoria durante cinco minutos, retirando el ajo.
5. Poner 320 gramos de arroz en una cacerola aparte y dorarlo durante dos minutos.
6. Verter medio vaso de vino blanco y dejar que se evapore.
7. Cocer el arroz vertiendo poco a poco el caldo vegetal y procurando que se absorba.
8. Al cabo de 10 minutos, añadir la achicoria y mezclar con cuidado.
9. Dejar cocer durante ocho minutos más.
10. Cuando la cocción casi haya finalizado, incorporar 50 g de queso de vaca curado y remover.
11. Apagar el fuego y añadir otros 30 gramos de queso y 30 gramos de mantequilla.
12. Servir el risotto en una fuente.

Propiedades de la achicoria roja

La achicoria roja es una hortaliza, pariente de la endibia, que suele protagonizar muchas ensaladas de primavera y verano por su llamativo color y su textura y sabor. Se trata de una horaliza que tiene muchos beneficios para la salud, por lo que resulta interesante introducirla en las recetas para niños y las recetas para toda la familia. 

La achicoria es una hortaliza muy rica en fibra, motivo por el cual resulta adecuada para los niños que padecen estreñimiento y necesitan mejorar su tránsito intestinal. Además, la intibina, la sustancia que le da su característico color, ayuda al organismo a asimilar mejor las grasas. 

Esta función se ve favorecida por la inulina, un hidrato de carbono que abre el apetito, contribuye a la eliminación de toxinas y mejora la digestión de los alimentos. Por último, cabe destacar que se trata, como todas las hortalizas, de un alimento bajo en grasas.

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A continuación, te mostramos un vídeo con un práctico paso a paso para que lleves a cabo esta receta.