En un parto múltiple algunas de las complicaciones que pueden presentarse pueden ser previstas y otras no. Pero lo importante es que tu médico sabe cómo tratarlas y que tu tengas el conocimiento de ellas. Recuerda que en el tercer trimestre de tu embarazo se considera alto riesgo.
Las complicaciones más frecuentes en un parto múltiple son:
• Bebés mal colocados (la posición fetal).
Mediante la ecografía el médico conoce esta información de antemano y puede prever las acciones necesarias.
• Dilatación más lenta.
En un embarazo múltiple la matriz está más distendida y los músculos del útero pierden flexibilidad, por lo que las contracciones pueden ser menos intensas y la dilatación más lenta.
• Cordón umbilical enredado.
Esta situación se da cuando los bebés comparten bolsa. Frente a ello, los médicos practican una cesárea para evitar el sufrimiento de los bebés, evitando la pérdida de tiempo fundamental para ese alumbramiento.
• Compresión de cordón umbilical.
Cuando el cordón se adelanta a la presentación del segundo bebé hay peligro de que el cordón quede comprimido y el bebé no reciba suficiente oxígeno. En este caso será necesario practicar una cesárea.
• Desprendimiento de placenta.
Si ocurre esto después del nacimiento del primer bebé será necesario extraer inmediatamente al otro bebé para prevenir posibles síntomas de sufrimiento.
• Retención de placenta.
El médico puede solucionar esto realizando un alumbramiento manual.
• Hemorragia posparto.
Se produce cuando el útero está muy dilatado y no puede contraerse. Se soluciona con medicación.