¿Cómo saber que tu bebé no se siente bien?
A veces, sobre todo cuando eres mamá por primera vez, no es tan fácil comprender el lenguaje de tu bebé y es muy normal que se nos dificulte entender si no se siente bien y distinguir qué comportamientos pueden considerarse normales y cuáles no. Primero que nada, debes tener muy presente que cada bebé es distinto y que todos se comunican de manera diferente.
La buena noticia es que conforme pasen más tiempo juntos, se conocerán mejor y cada vez te será más fácil identificar si algo anda mal. ¡Tranquila, es solo cuestión de tiempo! Mientras tanto, hay señales que podrían advertirte que tu bebé está comenzando a enfermar o que hay algo que lo está molestando más allá de los gases, cólicos o malestares propios de los recién nacidos.
Estas son las señales a las que debes estar atenta:
- No aumenta de peso en las siguientes dos semanas desde que llegó a casa
- Su piel tiene una coloración amarillenta que no disminuye con el paso de los días
- Respira con mucha dificultad mientras lo amamantas o se cansa tanto que no termina de comer
- Su respiración se interrumpe continuamente mientras está dormido
- No se sobresalta o se despierta cuando escucha ruidos muy fuertes
- Su temperatura corporal llega a los 38 grados centígrados
- No ensucia el pañal por más de 72 horas
Hay señales más sutiles que también pueden indicarte que algo no anda bien, por ejemplo, que mantenga sus manitas cerradas y apretadas por mucho tiempo o que tenga periodos de llanto que se prolongan demasiado, aun cuando sus necesidades básicas (como alimento, cambio de pañal y sueño suficiente) están cubiertas.
Si tu bebé presenta alguna de estas condiciones de manera muy intensa o varias veces al día, consulta inmediatamente a tu pediatra. No te quedes con ninguna duda durante su próxima visita al médico y hazle todas las preguntas que necesites hacerle, recuerda que él es la persona más indicada para asesorarte y ayudarte a que tu bebé esté siempre saludable.