Los bous a la mar de Dénia, tocados pero no hundidos

Esta decisión del Ayuntamiento, que ha dejado con el agua al cuello a esta fiesta de gran tradición e historia que ahora quieren suprimir, contrasta con la imagen del propio alcalde Vicent Grimalt cuando hace dos años recogía con orgullo el prestigioso premio taurino 'Va de Bous' que la Generalitat concedió a los bous a la mar de Denia.

A pesar de que decisiones sectarias como esta pretenden ahogar la historia de un pueblo, los aficionados ya se han movilizado para reflotar lo que es sin duda su gran pasión. Ernesto Ordines, voluntario taurino y muy ligado a esta fiesta, ha utilizado las redes sociales para mostrar su repulsa a esta decisión y movilizar a la afición para que, con sus presencia, reivindique esta tradición.

«Sin bous a la mar no hay fiestas en Denia. Este festejo no entiende de ideología política, gobierne quien gobierne está obligado a promocionarlos y a protegerlos, y no atacarlos como van a hacer este año. Somos cultura y como cultura, así lo tienen que hacer», admite Ernesto Ordines en contra de la decisión del gobierno local. «Tenemos que hacer notar al Ayuntamiento que sus vecinos, la afición, el turismo… todos queremos bous a la mar. Pido respeto y apoyo a nuestra cultura y nuestra tradición», refuerza en su discurso.

El Ayuntamiento ha suprimido todas las actuaciones de las mañanas que tenían lugar a las 13 horas en la plaza (alegan altas temperaturas y poca participación); dos de las tres entradas, la del lunes y la del viernes por la tarde, mientras que se mantiene la de mañana sábado; y también se elimina el evento de la tarde del último domingo de fiestas. Los motivos que ha dado el concejal de Fiestas, Raúl García de la Reina, ante este tijeretazo son principalmente dos: el bienestar de los animales y la falta de interés en la gente.

El detonante para acelerar esta reducción fue sin duda el ahogamiento el pasado año de un toro. Un incidente, nada común, del que sacaron rédito los grupos animalistas y que el gobierno municipal ahora toma como principal argumento para justificar su tijeretazo, mientras que mantienen en sigilo el número de personas ahogadas en sus playas y piscinas sin que por ello prohiban el baño.

No han respetado ni la declaración de Fiestas de Interés Turístico Nacional aprobada en 1993 gracias al empeño y constancia del gran aficionado Paco Carrió, entonces concejal socialista, y que ha dado su versión sobre esta disputa: «No habrá nadie que acabe con los bous a la mar, estoy seguro. Pero sí creo que es necesario, por el bien de esta fiesta, que nos adaptemos a los tiempos y mejoremos algunas cosas como poner todos los medios necesarios para evitar que se ahoguen animales y así no dar motivos a los que quieren acabar con esta tradición».

Para mañana sábado, en el inicio de las fiestas de la Santíssima Sang, se espera una gran afluencia de público en la única entrada de estas fiestas, que saldrá desde La Glorieta y llegará al Puerto, donde está la plaza. Se confirma que habrá una gran representación, a modo de apoyo, de los demás municipios más representativos en los que se celebran todos los años bous a la mar: Teulada-Moraira, Xàbia y Benicarló. Es importante sacar cabeza y salir a flote. La afición de Denia no va a dejar que parte de su historia se hunda y para ello, cada día a las siete de la tarde y durante una semana completa, hay una cita con el mar y los toros en una de las plazas más singulares de cuantas se conocen.