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El Ayuntamiento y el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDAE) culminan en breve el proyecto de eficiencia energética que alcanza a más de la mitad del alumbrado municipal y que está ejecutado por SICE
La luz y los neones forman parte del paisaje de Benidorm. Son prácticamente ‘marca de la casa’, un acompañamiento perfecto para las historias que se suceden en la ciudad. Una imagen icónica, la de luces y neón, que cada vez es más sostenible y se consigue con un menor consumo gracias al desarrollo e implantación del proyecto ‘Suministro e instalación de luminarias led y regulación y control, para la mejora de la eficiencia energética en las instalaciones de alumbrado público de Benidorm’.
Este proyecto está cuantificado en más de seis millones de euros y financiado a partes iguales por el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDAE) –a través de fondos europeos- y el Ayuntamiento de Benidorm. Su ejecución está en manos de Sociedad Eléctricas (SICE) y alcanza a más de la mitad del alumbrado municipal.
La finalidad del proyecto es ahondar en la gestión sostenible y eficiente de Benidorm. Es decir, iluminar mejor gastando menos y siendo más respetuoso con el medio ambiente. De hecho, se estima que el alumbrado Benidorm dejará de liberar 2.422,78 toneladas de emisiones al año, reduciendo su huella de carbono y mejorando la calidad de vida de residentes y turistas.
Culminada la primera fase del proyecto en el Centro y los barrios de Colonia Madrid y Els Tolls, la segunda ha puesto el foco en la zona de Levante, Rincón de Loix y la Huerta, donde se actúa sobre 3.512 puntos de luz y 55 centros de mando. Esto supone renovar el 45,85% de los 7.660 puntos de luz existentes en esta zona, reduciendo de forma drástica la potencia instalada de 759,59 kW a 195,01 kW, unas proporciones en las que también se minoran las emisiones de CO2.
Además, las mejoras obtenidas dentro del contrato han permitido ampliar el alcance inicial del proyecto y llegar a más puntos de luz de los previstos inicialmente. Así, por ejemplo, en la segunda fase se han renovado las luminarias de un tramo ‘extra’ de alrededor de 500 metros de la Avenida Severo Ochoa. Y lo mismo ha pasado en la Calle Murcia, más cerca del casco urbano.
En cada área, las luminarias se adaptan a la estética del entorno y cuentan con equipo de regulación de flujo para fijar en todo momento el nivel de iluminación preciso y acomodarlo a las necesidades en las distintas franjas horarias. Además, están dotadas de un sistema de telegestión punto a punto para controlar y administrar los consumos energéticos de la instalación.
En paralelo a esa segunda fase, también se está desarrollando la tercera y última en la zona de Poniente. En total, el conjunto del proyecto supondrá 2.422,78 toneladas menos de emisiones, para lograr un Benidorm más verde, más sostenible y más eficiente.