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Polvos de talco. Adobestock
La OMS sospecha que el talco puede provocar cáncer

La OMS sospecha que el talco puede provocar cáncer

La evidencia científica es reducida, pero en experimentos con animales se ha concluido que existen «certezas» sobre sus efectos adversos para la salud

Viernes, 5 de julio 2024, 16:54

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La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que los polvos de taco son «probablemente cancerígenos». La Agencia Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés), estima que el mineral, empleado en el campo de la cosmética, puede tener capacidad para desplegar efectos cancerígenos en la población. El organismo sitúa el talco en el nivel 2A, el segundo escalafón más alto dentro de su escala de identificación de peligros. Esta ubicación significa que, aunque las evidencias acumuladas aún son reducidas, se piensa que los polvos pueden provocar tumores, especialmente en ovarios. Después de hacer experimentos en laboratorio con animales, se concluye que hay certeza suficiente, así como «una fuerte evidencia mecanicista», que abona la hipótesis de sus efectos adversos en la salud.

Para la agencia de la OMS, el talco revela «características clave de carcinógenos en células humanas y de sistemas experimentales». La IARC apunta al acrilonitrilo, un compuesto que se usa en la industria textil y de plásticos para el consumo como causante de la aparición de tumores. Para los expertos, la exposición a este producto durante la extracción o el procesamiento es peligrosa. Pero no solo eso. Si la población general entra en contacto con esta sustancia a través del uso de cosméticos o polvos corporales que contienen este mineral, como maquillajes o desodorantes, puede hallarse en riesgo.

Según un estudio llevado a cabo por expertos de la agencia, que será publicado en la revista especializada 'The Lancet Oncology' el próximo año, las investigaciones apuntan a un incremento de los casos de cáncer de ovarios cuando los polvos de talco son usados en la región perineal (pubis y ano). Otro riesgo, aunque menos estudiado, está presente en alimentos, medicamentos y otros productos. La IARC no oculta su inquietud por la contaminación del talco con asbesto, una sustancia parecida al amianto y tenida por un peligroso cancerígeno.

Trabajo nocturno

Si bien la evidencia científica es limitada, el grado de certeza sobre su potencial cancerígeno es el mismo que se tiene sobre los efectos del consumo de carne roja o los riesgos del trabajo nocturno. La inscripción en el grupo 2A no aclara el grado de riesgo de desarrollar tumores ante una determinada exposición.

Los investigadores también han advertido una mayor tasa de cáncer de ovario en las investigaciones que analizaban la exposición de mujeres que trabajaban en la industria de la pulpa y el papel.

En experimentos con ratas, el tratamiento con talco causó una mayor incidencia del cáncer en las glándulas suprarrenales y en el pulmón de las hembras, mientras que en los machos se notificó una combinación de tumores benignos y malignos, también en la médula suprarrenal.

Con relación a la evidencia de mecanismos habituales de los compuestos que causan cáncer, los científicos de la IARC aducen que el talco presenta características clave de los carcinógenos, entre ellas la «inducción de inflamación crónica y la alteración de la proliferación celular, la muerte celular o el suministro de nutrientes».

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