La inflación volvió a subir en junio y, si bien se mantiene dentro del rango meta establecido por el Banco Central del Uruguay (BCU) desde hace 12 meses, empieza a reacelerarse y superó el núcleo del objetivo que se fija el gobierno, del 4,5%.
¿Qué hay detrás del aumento de la inflación en los últimos meses?
El IPC se aceleró en mayo y junio, bajo el impulso de ciertos factores que además constituyen señales de alarma a futuro.
-
La inflación convergería en una "zona de confort" en torno al 6%, estiman los expertos
-
Atraso cambiario: advierten que un dólar a $ 45 llevaría la inflación a más del doble
Es que el IPC alcanzó el 4,96% anual tras el aumento conocido este miércoles y el previo incremento de mayo, mientras que algunos especialistas anticipan que continuará por el camino alcista en los próximos meses.
Ante esta posible escalada, el BCU proyecta que la inflación se mantendrá dentro del rango meta por los próximos dos años, aunque hay varios factores que explican esta suba y constituyen señales de alarma a futuro.
La suba del dólar
El valor del dólar es uno de los precios de la economía que puede contribuir al alza del IPC y el tipo de cambio lleva tres meses en crecimiento, lo que lo llevó a tocar su valor máximo en un año y ocho meses.
Concretamente, el billete verde subió un 2,04% en abril, un 1,24% en mayo y tuvo en junio su incremento más pronunciado, con una apreciación del 3,09%, lo que tuvo su impacto en el nivel del IPC.
La inflación a la baja del año pasado
Por otra parte, al comparar a nivel interanual, junio de 2023 fue un mes con “inflación negativa”, con un descenso del 0,5% en el índice, por lo que el aumento mensual del 0,36% se hizo sentir.
Este escenario podría repetirse este mes, debido a que la comparación será contra un julio del año pasado donde la inflación retrocedió un 0,4%. Para completar un panorama donde el indicador podría seguir escalando, aparece agosto de 2023, cuando el registro fue bajo, del 0,2%, lo que podría volver a incrementar el IPC.
El aumento del consumo interno
Por otra parte, el crecimiento de la masa salarial y del salario real en los hogares podría derivar en un aumento del consumo interno y, por consiguiente, impulsar los precios al alza.
A eso se suma el hecho de que la brecha de precios con Argentina se había reducido, desincentivando el desvío de consumo hacia ese país por el constante cruce de uruguayos.
Sin embargo, en las últimas semanas comenzó a incrementarse la diferencia cambiaria al ritmo del dólar blue en el mercado paralelo de Argentina y, a pesar de que no existen los niveles preocupantes del año pasado, podría ayudar a una disminución de la inflación en Uruguay.
Dejá tu comentario