El Gobierno insiste en urgir al Ayuntamiento de San Andrés la apertura del vial de San Juan de Dios
En una respuesta escrita a la pregunta parlamentaria presentada por los diputados 'populares' Ester Muñoz, Silvia Franco y Héctor Palencia, el Gobierno ha recordado que el secretario de Estado de Transportes y Movilidad Sostenible, José Antonio Santano, ya trasladó en abril a la alcaldesa de San Andrés del Rabanedo, la leonesista Ana María Caurel, la urgencia de abrir el vial de San Juan de Dios.
Una obra ya ejecutada por Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) que, en sus propias palabras, “mejorará de manera notable la movilidad entre San Andrés del Rabanedo y León” y “facilitará el acceso directo al hospital anexo y al centro comercial Espacio León”.
Asimismo, con respecto al “proyecto de integración ferroviaria blanda” en el municipio de San Andrés del Rabanedo, el Ejecutivo central ha precisado que la propuesta del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible -que “apuesta por alcanzar un consenso con el Ayuntamiento para impulsar la solución planteada”- va a beneficiar a los habitantes al generar “nuevos espacios públicos, paseos peatonales y ciclistas y zonas verdes” que “cohesionarán el entorno” y “permitirán la permeabilidad en el municipio”.
“El tren permanecerá en el centro de San Andrés, integrándolo en el entorno y cubriendo las necesidades de la ciudadanía y del sistema ferroviario”, ha señalado el Gobierno para, a renglón seguido, defender que “se puede ejecutar en un tiempo más razonable y con un coste asumible por todas las partes” frente a un soterramiento que “tendría un coste de más de 350 millones de euros, que tendría que ser cofinanciado por todas las administraciones implicadas”.
El proyecto contempla la construcción de un nuevo paso inferior mixto (peatones, vehículos y bicis) en el ámbito de la avenida Párroco Pablo Díez, dando continuidad en línea recta a este vial. Además, la actual pasarela metálica que pasa sobre la vía se trasladará al Camino La Raya.
La propuesta de integración contempla cubrir 400 metros de vías entre la avenida Párroco Pablo Díez y la calle Voluntario Ángel Soto, desde el actual paso superior en curva, hasta superar la pasarela peatonal que conecta las calles Limonar de Cuba y Antonio Colinas.
La solución promoverá espacios públicos ajardinados, paseos peatonales y para ciclistas y zonas verdes para la cohesión y la permeabilidad transversal en el entorno.
Una de las actuaciones se desarrollará en el ámbito de la curva de Párroco Pablo Díez, donde se propone una separación de los itinerarios peatonales y bicicletas del edificio de viviendas adyacente; creando, además, una barrera vegetal con la gran superficie comercial, situada en la parcela colindante; dando continuidad a la actual senda ciclista preexistente y generando nuevos espacios públicos sobre el cajón ferroviario.
Otra de las actuaciones se realizará en el ámbito del parque Juan Pedro Aparicio, aportando continuidad y conectando con el actual parque. En el lado este se construirían taludes y se promoverían nuevos puntos de conexión peatonal y permeabilidad hacia el lado oeste. En el lado oeste se ubicarían nuevas escaleras y muros vegetales hacia la calle Limonar de Cuba.
La propuesta incluye actuaciones en el tramo hasta la calle Voluntario Ángel Soto, donde se proponen nuevos itinerarios de permeabilidad peatonal, con la reposición de ascensores a ambos lados de la traza ferroviaria, la instalación de escaleras en el extremo norte, por cada lado, y la ejecución de rampas peatonales (una a cada lado de la actuación).
