Cuánto consume un aire acondicionado y trucos para reducir el consumo sin pasar calor

El aire acondicionado se ha convertido en un elemento indispensable para los meses más calurosos del año, cuando las altas temperaturas obligan a buscar formas de refrescar el hogar. 

Sin embargo, el uso constante de este aparato puede generar un aumento considerable en las facturas de electricidad. Por esta razón, es importante saber cuánta potencia requiere y cómo reducir su consumo energético sin comprometer el confort que necesitas.

A través de pequeñas acciones y ajustes en la configuración del aire acondicionado, es posible disfrutar de un ambiente fresco y agradable sin que tu bolsillo se vea afectado. 

Eso sí, debes aplicar varias estrategias para optimizar el funcionamiento de dicho electrodoméstico y aprovecharlo al máximo, considerando todas las características para una climatización eficiente.

• ¿Cuánto consume un aire acondicionado?
• ¿Cómo calcular el consumo de tu aire acondicionado?
• Trucos para reducir el consumo del aire acondicionado

¿Cuánto consume un aire acondicionado?

Para empezar, es fundamental tener en cuenta que el consumo se mide en kilovatio hora (kWh) y varía en función de diferentes factores. 

Para ser más específico, estos son los aspectos que hay que considerar para determinar el gasto energético:

• Potencia: se mide en frigorías (frig) y determina la capacidad de enfriamiento del aparato. Un aire acondicionado de 2.000 frig consume menos que uno de 3.500 frig. Por lo tanto, es cuestión de que investigues las especificaciones del modelo de tu aire acondicionado.
• Eficiencia energética: es un factor que indica la eficiencia del aparato. En este contexto, un dispositivo con etiqueta A consume menos que uno con etiqueta C.
• Tiempo de uso: cuanto más tiempo lo uses, mayor será el consumo. A su vez, se tiene que considerar el promedio de la potencia utilizada al mantenerse encendido el compresor de aire. 
• Condiciones ambientales: la temperatura exterior, la humedad y la insolación también influyen en la cantidad de energía requerida.

De esta manera, se puede decir que un aire acondicionado split puede llegar a necesitar aproximadamente entre 1 y 2 kWh por hora de uso, lo que representa un gasto considerable si lo utilizas de forma prolongada.

¿Cómo calcular el consumo de tu aire acondicionado?

Ahora que ya sabes los factores que influyen en el ahorro de energía de tu casa, para calcular el consumo total debes usar una fórmula. Esta es la forma más fácil de hacerlo:

• Consulta la potencia del aparato: la encontrarás en la placa de especificaciones o en el manual de instrucciones.
• Determina la potencia por el tiempo de uso: supongamos que tu aire acondicionado es de 2.000 frig y lo sueles usar 8 horas al día, el consumo sería: 2.000 frig/h x 8 h/día = 16.000 frig/día.
• Divide la potencia por 1.000 para obtener el consumo en kilovatios (kW/día): 16.000 frig/día / 1.000 frig/kW = 16 kW/día.
• Multiplica el consumo en kW/día por el precio del kWh: si el precio del kWh es de 0,20 €, el consumo diario sería: 16 kW/día x 0,20 €/kWh = 3,20 €/día.
• Multiplica el consumo diario por el número de días que usas el aire acondicionado: por ejemplo, si lo usas durante 4 meses (120 días), el consumo sería: 3,20 €/día x 120 días = 384 €.

Trucos para reducir el consumo del aire acondicionado

Afortunadamente, existen varios trucos para ahorrar energía con un aire acondicionado. Estos son ideales para mantener el ambiente del hogar fresco y evitar el calor mientras se disminuye el consumo eléctrico. 

Considera estos consejos para aprovechar tu dispositivo al máximo:

• Realiza un mantenimiento regular: un aire acondicionado en buen estado funciona de forma más eficiente y consume menos energía. Además, evitas que el compresor se sobrecaliente.
• Instala un termostato programable: es un accesorio que te permite controlar la temperatura en cualquier lugar, incluso si no estás en casa.
• Ajusta la temperatura: por cada grado que aumentes en el termostato, se ahorra un 5% en el consumo de energía, mientras que por cada grado que desciendas, el consumo aumenta un 8%. Si quieres gastar menos, una temperatura entre los 24 °C y 26 °C sería ideal para mantener una buena climatización.
• Apaga el aire acondicionado cada cierto tiempo: cuando no estés en casa, es recomendable apagar el aire acondicionado para evitar un consumo excesivo de energía. Asimismo, puedes usarlo de manera intermitente, por ejemplo, activándolo solo por las noches para dormir o durante el mediodía cuando la temperatura es más elevada.
• Activa el Modo Eco: si tu aire cuenta con un Modo Eco, actívalo para ahorrar energía durante las horas que no se suele usar. Esta modalidad te da la capacidad de mantener el ambiente fresco sin aumentar el gasto energético.
• Utiliza un ventilador: ayudan a distribuir el aire frío y a crear una sensación de frescor sin necesidad de bajar tanto la temperatura del aire acondicionado. Recuerda que este dispositivo no enfría el aire como tal, solo lo hace circular, así que intenta ubicarlo en un sitio estratégico de tu casa. 

Comprar un aire acondicionado portátil, ¿qué debemos tener en cuenta en 2024?

• Cierra puertas y ventanas: para que el aire frío no se escape, asegúrate de que todas las puertas y ventanas estén cerradas. Al mismo tiempo, cubre cualquier apertura de la casa que sea perjudicial para la temperatura. 
• Baja las persianas: estos accesorios impiden que la luz del sol entre en la casa y caliente el ambiente. Es muy recomendado hacer esto si la luz solar pega directamente hacia tus ventanas, especialmente durante el mediodía.
• Luces blancas: aunque no lo parezca, la luz es algo que puede influir bastante en la temperatura. Si tu casa cuenta con muchas lámparas, cambia los bombillos amarillos por los de luz blanca. En el caso de que no puedas, apaga estas luces cuando no las utilices.
• Aislamiento térmico de vivienda: el tipo de aislamiento térmico de tu casa influye mucho en la capacidad de tu aire. Si piensas que este puede ser el problema, lo ideal sería instalar un aislante térmico de fibra de vidrio en la parte del techo si estás en una casa o en las paredes si te encuentras en un apartamento.

Ahora bien, si en algún momento piensas comprar un aire acondicionado nuevo, lo mejor es optar por un modelo de alta eficiencia energética. Estos son clasificados con la etiqueta A en sus especificaciones y consumen menos energía a pesar de que se usen por tiempos prolongados.

Sin duda, un consumo responsable te ayudará a ahorrar dinero en tus facturas de la luz y a contribuir al cuidado del medio ambiente. 

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