Coach USA, el operador de Megabus y otras dos docenas de empresas, ha solicitado la protección por bancarrota debido a la disminución del número de pasajeros, que no se ha recuperado desde la pandemia del COVID-19.
La empresa ha declarado que seguirá operando con autobuses mientras se somete a una venta de activos supervisada por la corte.
En los documentos presentados ante los tribunales, Coach USA afirmó que el número de pasajeros disminuyó un 90% en 2020 durante los cierres causados por la pandemia. Aunque en cierta medida el número de pasajeros se ha recuperado, la empresa sólo alcanzó el 45% de los niveles anteriores a la pandemia en 2023. Mientras tanto, la empresa dijo que enfrenta un aumento de los costos de funcionamiento debido al aumento del combustible, los seguros, los costos laborales y la inflación.
Desde su fundación en 2006, Megabus ha gestionado líneas de autobús en Chicago. La empresa interrumpió sus operaciones en Chicago en 2020, durante la pandemia, y las reanudó en 2023.
Coach USA gestiona 25 negocios diferentes y tiene aproximadamente 2,700 empleados a tiempo completo y medio tiempo, según los documentos de la corte. La empresa ha llegado a tres acuerdos de venta distintos, pero están sujetos a ofertas mejores en el proceso de venta supervisado por la corte.
Coach USA fue comprada por $270 millones en 2019 por la firma de capital privado Variant Equity Advisors.
Mientras que las aerolíneas y otras industrias de transporte público han recuperado prácticamente sus niveles de pasajeros previos a la pandemia, las empresas privadas de autobuses siguen rezagadas. Según la última encuesta de la Asociación Estadounidense de Autobuses, a finales de 2022 el número de usuarios de autobús solo había recuperado el 40% de las cifras anteriores a la pandemia.
Según la encuesta, el sector privado de autobuses también está experimentando una importante consolidación. Greyhound, una empresa establecida de viajes de bajo presupuesto en Chicago, fue comprada por FlixBus en 2021. Greyhound perdió la propiedad de su estación de West Loop durante una venta y probablemente será desalojada en octubre. Aún no está claro dónde recogerán y dejarán a los pasajeros los autobuses cuando pierda su estación.
Traducido por Gisela Orozco para La Voz Chicago
